La Santa Sede ha publicado ha publicado el informe anual de la Autoridad de Inteligencia y Supervisión Financiera.
Este informe destaca que el Vaticano ha aumentado sus actividades de cooperación interna con las demás Autoridades competentes de la Santa Sede y del Estado Vaticano, así como la cooperación internacional con la participación en los foros Moneyval y Egmont. Así mismo, también aumentan los memorandos de entendimiento, firmados en 2023 con 9 países: Argelia, Azerbaiyán, Bahamas, Curaçao, Líbano, Senegal, Mauricio, Nepal y Zambia.
Para el presidente de ASIF, Carmelo Barbagallo, «mantener y desarrollar una sólida red de relaciones internacionales sigue siendo un objetivo estratégico fundamental».
El informe de este organismo profundiza en las actividades de supervisión de la ASIF -en sus dos componentes de lucha contra el blanqueo de capitales y la financiación del terrorismo y de supervisión prudencial- sobre la entidad supervisada, a saber, el Istituto per le Opere di Religione (IOR), la única autorizada a ejercer profesionalmente actividades financieras en la jurisdicción.
El informe explica que, desde 2020, la Oficina de Supervisión ha realizado tres inspecciones en el IOR, incluida una inspección prudencial «de base amplia», una inspección de seguimiento y una inspección «específica» contra el blanqueo de capitales y la financiación del terrorismo.
En cuanto a las actividades específicas, ASIF informa de 123 recibidas en 2023, de las cuales 118 del IOR, cuatro de Autoridades de la Santa Sede y del Estado de la Ciudad del Vaticano y una de una organización sin ánimo de lucro. Valores en línea con los registrados en 2022. Por el contrario, disminuyó el número de informes remitidos al Promotor de Justicia: once.
El número de suspensiones de operaciones y transacciones también disminuyó: sólo un caso de importe «limitado» (5.848 euros) que requirió el uso de medidas preventivas en virtud del artículo 48 de la Ley nº XVIII. «Una disminución sustancial», por lo tanto, de los casos que requirieron medidas preventivas por parte de la ASIF en comparación con los dos años anteriores: en 2021, de hecho, se habían registrado 4 suspensiones de operaciones y transacciones y el bloqueo de una cuenta corriente, por un importe total de 626.188 euros; en 2022, se habían registrado 5 suspensiones de operaciones y transacciones, por un importe total de 829.050 euros.
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