Los miembros de los órganos conductivos de la DAIA, es decir del Consejo Directivo y del Consejo Federal, no han de olvidarse fácilmente del lunes 7 de mayo de 2018. Ese día se inició la sesión del segundo de estos cuerpos, integrado por los representantes de las Filiales DAIA del interior del país, que preside Diego Dlugovitzky, con la presencia de miembros del Consejo Directivo, órgano que con una casi totalidad de sus miembros e invitado especiales sesionó al inicio de la noche hasta pasadas las 21.
La forzada renuncia del presidente de la institución, Ariel Cohen Sabban, y los motivos que la generaron fue el tema central de las deliberaciones, junto con la decisión de quienes continuarán conduciendo la DAIA hasta que asuman las próximas autoridades electas por las instituciones que conforman la institución y las Filiales DAIA, de acuerdo a los procedimientos establecidos por el Estatuto vigente.
Las deliberaciones fueron muy duras, pues en especial, durante la sesión del Consejo Federal, sus miembros plantearon un pedido de renovación. En un comunicado firmado por sus autoridades, Diego Dlugovitzky y Víctor Kovalsky (secretario), luego de repudiar el accionar del ex presidente de la DAIA, afirmaron: “Desde el Consejo Federal de la DAIA, confiamos en que llegó el tiempo de una renovación, la cual debe llevarse adelante lo antes posible y ratifica su compromiso de seguir trabajando en cada filial, a favor de la dignidad judía y la construcción de una sociedad mejor”. A nuestro entender, esto implicaba, por lo menos, sumar a la renuncia de Cohen Sabban la de los integrantes del denominado “Ejecutivo”: vicepresidentes, secretario general, tesorero, prosecretarios y protesoreros. Tanto del actual presidente, Alberto Indij, y el secretario general, Mario Tanembaum, como el resto de los directivos presentes, les manifestaron que ese planteo sería presentado en la sesión del Consejo Directivo de esa noche y se les informaría inmediatamente lo resuelto.
En un clima de tensión se desarrolló la sesión del Consejo Directivo. Si bien todos los miembros presentes plantearon la necesidad de estar unidos, existieron ciertas divergencias sobre la manera en que se debía actuar para preservar a la institución y que los hechos de público conocimiento no la afecten en el cumplimiento de su misión.
Respecto a los pasos inmediatos a seguir, el Consejo Directivo aprobó por unanimidad que Alberto Indij asuma la presidencia y que Alberto Hammerschlag, Luis Grynwald y Diego Dlugovitzky pasen a ser los vicepresidentes primero, segundo y tercero respectivamente. Ellos conducirán la institución hasta la asunción de las nuevas autoridades, que será durante el mes de noviembre, luego de haberse efectuado la Asamblea Electora el mes anterior.
Estas decisiones, tomadas por unanimidad, significan que el Consejo Directivo de la DAIA rechazó la solicitud de los integrantes del Consejo Federal, a quienes invitó a designar a miembros del mismo para que trabajen en la conducción diaria de la DAIA.
Lo decidido por el Consejo Directivo de la DAIA fue confirmado por su secretario general, quien dijo que si bien se lo habían informado a los miembros del Consejo Federal, no habían recibido una respuesta de parte de ellos. Nosotros podemos poner en conocimiento de nuestros lectores que el Consejo Federal, mejor dicho sus integrantes, han decidido no aceptar la propuesta que les realizó el Consejo Directivo de la DAIA.
El hecho de que los miembros del Consejo Directivo de la DAIA sotuvieran que el proceso de renovación de autoridades se efectúe de acuerdo a lo que estaba previsto antes de que Ariel Cohen Sabban se hubiera visto obligado a renunciar a la presidencia, se contradice no sólo con la postura de los integrantes del Consejo Federal, sino también con la de muchos simples miembros de nuestra comunidad y de algunos dirigentes. Quiénes tienen razón, es imposible saberlo hoy. Sólo el transcurso de los días y/o semanas pueden ir aclarando la situación que atraviesa la DAIA y todas las instituciones judías afectadas por el imprudente proceder de quien presidía la DAIA, una de las entidades centrales de la comunidad judía de la República Argentina.
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