El acto en conmemoración por el aniversario del fallecimiento del fiscal, Alberto Nisman, comenzó esta tarde pasadas las 19hs en la Plaza Alemania, en avenida del Libertador y Scalabrini Ortiz, con la presencia de la titular de la Oficina Anticorrupción, Laura Alonso; el presidente de la DAIA, Ariel Cohen Sabban; el Jefe de gobierno de la Ciudad de Buenos Aires, Horacio Rodríguez Larreta, y la vicepresidenta de la Nación, Gabriela Michetti, entre otros funcionarios y representantes de la comunidad judía.
Antes de iniciar el acto, la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, destacó en diálogo con la Agencia Judía de Noticias: "Hace mucho que estamos siguiendo este tema, y ayer el presidente (Mauricio Macri) dio claramente una visión de que queremos llegar a la verdad. Hay cambios muy importantes: La desclasificación de todos los documentos de inteligencia, el hecho de que la causa haya tomado nuevos bríos, y eso es muy importante para nosotros, en una comisión que investigue el atentado a la AMIA y las consecuencias que han tenido en el ministerio de Justicia, muchas medidas importantes".
"El hecho de que el memorándum con Irán no exista más es algo muy importante y muy trascendente que no debemos olvidarnos", agregó.
Antes de que los oradores principales del acto, el periodista Joaquín Morales Solá; el Fiscal Ricardo Sáenz y el presidente de la DAIA, Ariel Cohen Sabban subieran al escenario para dar sus respetos al fiscal fallecido, Marcela Arroyo leyó una carta escrita por las hijas de Nisman, Iara y Kala, en la que agradecen a todos los presentes por haber estado y por haber honrado la memoria de su padre.
"Hoy es un día especial, preferimos pasarlo en los mismos lugares en los que hubiéramos estado con nuestro papá para recordarlo de un modo feliz, por eso no estamos con ustedes”, explicaron a través de la carta, que inauguró el acto de manera emotiva.
A continuación, Joaquín Morales Solá se dirigió a la multitud, que entre pedidos de justicia, escuchó atentamente las palabras del periodista: “Según mi convicción personal hoy se cumple un año del asesinato de Alberto Nisman. Hoy se cumple un año sin que la justicia haya podido establecer siquiera si era un crimen o un suicidio, hoy se cumple un año en el que la sociedad se movilizó al principio y después la vimos adormecida, aletargada, como indiferente, lo que considero la muerte política más importante de la sociedad argentina”.
En su discurso, Morales Solá señaló que al Fiscal Nisman no lo mataron una vez, sino tres veces: La primera cuando hallaron su cuerpo, la segunda vez cuando lo injuriaron y calumniaron y la tercera cuando algunos jueces rechazaron investigar la denuncia que había hecho la fiscalía contra el gobierno de ese entonces.
“La muerte de Nisman interpela al Estado y nos interpela a nosotros como sociedad, interpela al Estado porque estamos a casi 22 años del crimen de la AMIA y todavía no conocemos todas las líneas de complicidad que hicieron posible ese crimen”, remarcó. “No conocemos el resto de las complicidades internas, sospecho que muchos estaban escondidos en el Estado”.
“El atentado fue una agresión externa a la comunidad argentina en su conjunto cometida en territorio soberano argentino”, resaltó Morales Solá.
“Necesitamos saber qué pasó con Nisman; ¿fueron cómplices? ¿Fueron ineptos? ¿o la ineptitud tapó la complicidad? Nos deben una respuesta a estas preguntas un año después. Fue un crimen, no un suicidio. Que no nos hablen ahora de un suicidio inducido, porque ese es otro nombre del crimen. Alguien ordenó matarlo, que lo mataran antes de que expusiera sus pruebas ante el congreso de la Nación, por lo tanto es un crimen político”, arremetió con dureza.
“Por último, no permitamos que pase un año,un mes y si es posible ni una semana más sin que sepamos lo que paso con el fiscal Nisman”, concluyó el periodista.
El fiscal Ricardo Sáenz habló en nombre de la Asociación de Magistrados y Funcionarios de la Justicia nacional, en especial de los fiscales colegas de Alberto Nisman, refiriéndose a su aspecto profesional.
“Alberto Nisman encontró la muerte en el ejercicio de su función de fiscal. Este final tan trágico y violento constituye un eslabón de hechos que marcaron para siempre la historia reciente de la Argentina. El trabajo de Nisman fue lo que todos esperábamos que se hiciera, pedir la indagatoria de ciudadanos iraníes y lograr que interpol les fijara la captura internacional.Esto no era fácil, pero Nisman lo logró”, expresó el fiscal Sáenz al comienzo de su discurso en homenaje a su colega y resaltó que la causa por encubrimiento es una de las más graves que existe contra el anterior gobierno.
“No podremos tener una verdadera República arrastrando esa deuda (el esclarecimiento de la muerte), esperamos no dejarlo para las próximas generaciones”, finalizó.
Por último, el presidente de la DAIA, Ariel Cohen Sabban, junto al presidente del Consejo Federal de la entidad, Diego Dlugovitzky, dirigió la palabra al público.
“Una vela encendida hoy como la que tenemos en la mano puede apagarse, puede consumirse o puede encender otras velas. Cuando la llama de esa vela es transferida a otras,continuara ardiendo después de que la vela original se hubo extinguido. Eso es lo que venimos hoy a testimoniar en esta plaza,nos congregamos con muchas velas para recordar rendir homenaje a aquellos valores que la democracia nos permite tener”, expresó.
“La trágica muerte del fiscal Alberto Nisman marcó un siniestro punto de inflexión en nuestra historia reciente; un fiscal de la Nación comprometido con la investigación del atentado terrorista más grave que ha sufrido nuestro país es encontrado muerto de un disparo en su departamento en momentos que había formulado una grave acusación contra las autoridades máximas nacionales. La falta de respuestas constituye un agravio al cuerpo social”, puntualizó.
“40 millones de argentinos no queremos estar aquí el año próximo para seguir lamentando la falta de justicia; 40 millones de argentinos no queremos que se repita la denegación de Justicia de la Causa AMIA; nos solidarizamos con la señora Sara Garfunkel por el irreparable dolor que significa perder a un hijo; acompañamos a Iara y a Kala, que a edad tan temprana han perdido trágicamente a su padre; queremos saber cómo se disparó el arma y quien lo hizo; preguntamos cómo es posible que un año de investigación no conduzca a nada, no queremos que Nisman sea la víctima 86 del atentado contra la AMIA-DAIA; nos preguntamos cómo seguir viviendo en el marco de muertes violentas no esclarecidas aún”, pronunció el presidente de la DAIA, antes de pedir a los presentes que levanten las velas para seguir iluminando el camino de la verdad y la justicia.
“El 18 de julio de 1994, 85 muertos en el peor atentado terrorista de a historia argetina, 18 de enero de 2015, el fiscal que investigaba la causa aparece muerto con un disparo en la cabeza; 18 de enero de 2016 reclamamos justicia por la Embajada de Israel, por el atentado terrorista a la AMIA - DAIA, justicia para el doctor Alberto Nisman y que su muerte no haya sido en vano”, concluyó el último orador del acto.
Antes de desconcentrarse, la multitud encendió las velas en respetuoso silencio y entonó el himno nacional argentino al unísono.
También estuvieron presentes embajadores y funcionarios,entre ellos la canciller, Susana Malcorra; al ministro de Justicia, Germán Garavano; al secretario de Derechos Humanos, Claudio Avruj; el ex presidente de la DAIA, Julio Schlosser; Guillermo Borger; Marta Nercellas,Claudio Eppelbaum del Congreso Judío Latinoamericano;el vicepresidente 2º de AMIA, Pablo Reisman; el rabino Sacca; la embajadora de Israel en Argentina, Dorit Shavit, y el senador, Julio Cobos.
El 18 de enero de 2015, Alberto Nisman fue encontrado muerto con un disparo en la cabeza en su departamento en Puerto Madero, horas antes de presentarse ante el Congreso para fundamentar su denuncia a la ex presidenta Cristina Fernández de Kirchner y al ex canciller Héctor Timerman por encubrimiento de los iraníes en la causa AMIA.
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