La feliz noticia abre una especial oportunidad, tanto para el Siervo de Dios Enrique Shaw, donde se estudiará el posible milagro, como también para nuestra Diócesis Castrense, puesto que es la primera vez que se presenta una causa de esta magnitud. Luego de la presentación de la Dra. Silvia Correale de la Causa de Beatificación y Canonización del Siervo de Dios Enrique Shaw en febrero de 2019 por el cual se solicita la instrucción Diocesana super miro, sobre el presunto milagro atribuido a la intercesión de dicho Siervo de Dios.

Señalando además, que en febrero, también se procedió al rescripto de prórroga de competencia a nuestro Obispado Castrense de Argentina, se lograba la autorización para la instrucción de investigación en nuestra Diócesis Castrenses. En tal sentido, y respondiendo a la exigencia correspondiente, se procedió hoy al inició del proceso que estudiará el presunto milagro atribuido a el Siervo de Dios Enrique Shaw.

Luego de la lectura de la biografía del Siervo de Dios por parte del Canciller Castrense de Argentina, Padre, Francisco Rostom Maderna, le siguió la palabra del Vice Postulador, Dr. Juan Gregorio Navarro Floria. Quien leyó ante los presentes, una síntesis del presunto milagro, quien solicitó en forma expresa, al Obispado Castrense de Argentina, Mons. Olivera la iniciación del proceso, entregando a su vez copia de lo leído.

Seguidamente, en respuesta al pedido del Vice Postulador, Navarro Floria, el Obispo Castrense de Argentina, procedió a la conformación del Tribunal y toma de juramento de los señores integrantes del mismo, quienes deberán investigar la causa del posible milagro del Siervo de Dios. De esta manera, juraron como Juez Delegado e Instructor, Mons. Licenciado José Antonio Passarell; Promotor de Justicia, Pbro. Dr. Juan Lisandro Scarbino; Perito Médico, Pbro. Médico Sergio Omar Fochesato; Notario Actuario, Abogado Licenciado Carlos Alberto González y Notaria Adjunta, Sta. Cecilia Imbrogno, Virgen Consagrada.

Luego de las firmas de los documentos correspondientes, Mons. Olivera se dirigió a los presentes, expresando el beneplácito que provoca a nuestra Diócesis particular el hecho de iniciar este proceso. Donde señalaba, que el Siervo de Dios, “fue un integrante de nuestra Armada Argentina, un destacado padre de familia y un ejemplo de empresario, sin dudas nos produce mucha alegría iniciar esta causa, es un día muy importante para el Obispado Castrense de Argentina”.

También dijo, “en la medida que avancemos en la investigación, llegaremos al final de la misma para con su veredicto, en caso de ser positivo, poder avanzar y presentar todo ante la Santa Sede”. Continuando, recordó su dialogo con el Santo Padre cuando le habló sobre Enrique Shaw, “el Papa manifestó una vez más su admiración por este Siervo de Dios y la importancia que tiene que pronto pueda ser puesto como modelo para los empresarios y modelo de laicos”.

Cerrando su exposición, con la invocación religiosa, donde se incluyó la Oración de nuestro Siervo de Dios, Enrique Shaw y un especial ruego a nuestra Madre Santísima, Ntra. Sra. Stella Maris, Patrona de la Armada Argentina, Fuerza Armada a la que perteneció el Siervo de Dios. Enrique Shaw, nació el 26 de febrero de 1921, perdió a su madre siendo muy pequeño en 1925, su padre cumpliendo con el pedido de su esposa, confiando la formación de su hijo a un Sacerdote Sacramentado.

Fue alumno del Colegio “La Salle”, donde recibe su enseñanza y cultiva su vida espiritual, ingresando luego a la Escuela Naval Militar donde aflora un extraordinario testimonio de fe, mientras surca los mares del sur, descubre su compromiso en la labor apostólica. En 1943 se casa con Cecilia Bunge, con quienes forma su familia y tienen 9 hijos, en 1945 pide la baja en la Armada Argentina, para responder a su vocación por Dios con una especial misión.

Su corazón lo llevó a querer convertirse en obrero, pero el consejo de un Sacerdote le abre otra perspectiva y decide llevar el Evangelio al empresariado. Enrique Shaw, fue uno de los impulsores de la creación de la ACDE, Asociación Cristiana de Dirigentes de Empresa, siendo su primer presidente.

Integró el Primer Consejo de Administración de la UCA (Universidad Católica Argentina), trabajó para conformar el Movimiento Familiar Cristiano y promovió la sanción de la Ley de Asignaciones Familiares. Su vida está repleta de logros y trabajos, pese a ello, con apenas 41 años de edad, su vida se apagó, pese a ello, sus reflexiones están más vivas que nunca, decía el propio Enrique Shaw “nada anda bien en una sociedad donde muchos están mal”; “En la empresa hay que hacer crecer a los trabajadores en su dignidad” (…).

Oración

Oh Dios, tu siervo Enrique nos dio un alegre ejemplo de vida cristiana a través de su quehacer cotidiano en la familia, el trabajo, la empresa y la sociedad. Ayúdame a seguir sus pasos con una profunda vida de unión contigo y de apostolado cristiano. Dígnate glorificarlo y concédeme por su intercesión el favor que te pido… Por Jesucristo Nuestro Señor. Amén.