El purpurado argentino, creador de la Jornada Mundial de la Juventud, será proclamado beato este sábado a las 11 en una ceremonia frente a la basílica de la Virgen. Presidirá el enviado papal, cardenal Francisco Vérgez, quien fue su secretario por 23 años
Todo listo en Luján para la Eucaristía con rito de beatificación del cardenal Eduardo Pironio, a quien la Iglesia argentina define como "el profeta de la esperanza" y creador -junto con Juan Pablo II- de la Jornada Mundial de la Juventud. La celebración será este sábado 16 de diciembre a las 11, en la plaza General Belgrano, frente a la basília y santuario de la Virgen.
La Eucaristía será presidida por el enviado del Papa Francisco, cardenal Francisco Vérgez Alzaga, quien fue 23 años secretario personal del Papa Francisco. Participará de la misa el nuncio apostólico Miroslaw Adamczyk, junto con diversos obispos y sacerdotes.
La fiesta comenzará este viernes 15 de diciembre, a las 20, con la oración de las Vísperas en el interior del santuario mariano. Y, desde las 23 y hasta las 5, la Pastoral Juvenil Nacional organizó una Vigilia Joven, en la plaza General Belgrano.
En tanto, el domingo 17 de diciembre, a las 11, se celebrará la misa de acción de gracias por el nuevo beato en el interior de la basílica de Luján.
El 8 de noviembre, el Papa autorizó la beatificación de Pironio tras firmar el decreto que reconoce un milagro atribuido en 2006 al purpurado nacido en 1920 en la localidad bonaerense de 9 de Julio y fallecido en Roma en 1998. Se trata de la intercesión de Pironio en la curación sin explicación científica de Juan Manuel Franco, un bebé que en 2006 tenía 15 meses cuando salió de un cuadro de coma profundo luego de que sus padres rezaran a la figura del futuro beato.
El anuncio de la beatificación se da luego de que, en primer lugar, una junta de médicos del Vaticano constatara que la curación de Franco "supera la ciencia médica" y luego una Comisión de Teólogos corroborara que la familia del niño había rezado a Pironio por su sanación.
La sanación se Franco se dio luego de que, el 1 de diciembre de 2006, aspirara por error el contenido de un recipiente con purpurina (una sustancia pequeña hecha de pedazos de plásticos copolimerizados y metales), por lo que quedó en un cuadro de coma profundo.
Con el niño gravemente afectado, sus padres rezaron durante 13 días a una estampita del cardenal Pironio, obsequiada por un sacerdote de la parroquia San Antonio de Padua, y luego el niño se despertó sin rastros de elementos tóxicos en sangre.
El Papa había reconocido en 2022 las "virtudes heroicas" de Pironio y lo convirtió en "venerable".
De 9 de Julio al Vaticano
Pironio, nació el 3 de diciembre de 1920 en la localidad bonaerense de 9 de Julio. En 1943, se convirtió en sacerdote, y en 1964 fue consagrado obispo. Tras ocupar un vicariato en la diócesis de Mercedes, fue obispo auxiliar de La Plata y luego se hizo cargo de la de Mar del Plata.
Juan XXIII lo designó como una de las autoridades del Concilio Vaticano II y años después, a mediados de la década de 1970, llegó al Vaticano tras ser perseguido por la Triple A. La decisión fue tomada luego de que la organización también persiguiera y asesinara a María del Carmen Maggi, una de sus más íntimas colaboradoras cuando él era obispo de Mar del Plata.
En 1976 Paulo VI lo elevó a cardenal y fue el primer argentino en sonar como posible Papa. De hecho, fue uno de los más votados en el cónclave de 1978 que ungió a Juan Pablo I y luego en el que se eligió a Juan Pablo II.
A partir de allí se le otorgaron varias responsabilidades. Tuvo a su cargo la Congregación para los Religiosos e Institutos Seculares y luego fue presidente del Consejo Pontificio para los Laicos. Murió en Roma el 5 de febrero de 1998 y sus restos están sepultados en la Basílica de Luján.
Comentá la nota