Francisco recibió en el Vaticano a representantes de la Misión Evangélica Bautista Romaní en Italia. "La colaboración fraterna entre los cristianos es en sí misma un signo, un testimonio, el primer instrumento de evangelización en beneficio de todos", dijo el Pontífice.
El Papa Francisco recibió el jueves 12 de diciembre a representantes de la Misión Evangélica Bautista Romaní de Italia. Durante el encuentro, el Santo Padre pronunció un discurso de ánimo al grupo, extendiendo su saludo a todos los miembros del pueblo romaní, también conocido como gitanos, y a las comunidades que reciben asistencia y apoyo de esta misión.
Unidad y solidaridad
En el texto, Francisco destacó el vínculo que une a todos los cristianos como hijos de un mismo Padre y hermanos en Cristo, recordando que "por sus llagas hemos sido sanados", y subrayó la importancia de la unidad y la solidaridad en el camino común de la fe, la caridad y la esperanza, invitando a los presentes a renovar la certeza de que "nada ni nadie podrá separarnos jamás del amor de Dios".
El Papa animó a los representantes de las misiones a dar testimonio de este amor de manera concreta, a través de la caridad activa, y subrayó el papel esencial del Espíritu Santo para inspirar valor y alegría en el anuncio de la Buena Nueva de Jesucristo:
"Que el Espíritu Santo nos anime y fortalezca en nosotros el deseo de anunciar juntos el Evangelio de la esperanza, especialmente a las comunidades romaníes".
Trabajar juntos por el bien común
Francisco también reflexionó sobre la importancia de la colaboración entre los cristianos como testimonio esencial e instrumento de evangelización. «La unidad de acción inspirada en el Evangelio nos acerca a la plena unidad de la fe, mediante el conocimiento y la estima recíprocos», subrayó el Santo Padre al insistir en la necesidad de trabajar juntos por el bien común.
Al final del texto, el Santo Padre recuerda la proximidad de la Santa Navidad y anima a los presentes a continuar firmes en el camino de la fe, inspirándose en las palabras del Salmo 27: "Espera en el Señor, sé fuerte, que tu corazón se anime y espera en el Señor".
Para concluir, el Papa invitó a todos a rezar la oración del Padre Nuestro como signo de unidad y expresó su gratitud por la visita, reforzando su aprecio por el trabajo de la misión en favor de las comunidades gitanas en Italia
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