Por Walter Sánchez Silva

“Defendamos a la familia, que es oxígeno para hacer crecer a los hijos, aunque también en ella hay tempestades”, señaló el Santo Padre al encontrarse con unas 30 familias de la parroquia de Santa Brígida de Suecia, el barrio romano de Palmarola.

“Si los padres pelean es normal, pero tenemos la posibilidad de hacer la paz antes de que termine el día, porque la guerra fría del día después es terrible”, advirtió el Papa Francisco.

En el encuentro, al que asistió acompañado de Mons. Rino Fisichella, Pro-prefecto del Dicasterio para la Evangelización, el Pontífice dialogó y respondió a preguntas de padres de familia, ancianos, niños y jóvenes.

El Papa Francisco animó luego a los jóvenes presentes a dar testimonio de la fe y les recordó que tienen “la responsabilidad de seguir adelante con la historia. Una de las cosas bellas de los jóvenes es que se vuelven a levantar. Todos caemos en la vida, pero lo importante es no permanecer caídos”.

Tras señalar luego que la Iglesia “comienza a hacerse en la comunidad”, el Santo Padre indicó que “una parroquia donde los niños no son escuchados y los viejos son cancelados no es una verdadera comunidad cristiana. No se olviden que los viejos son la memoria y los niños la promesa”.

A la pregunta sobre cómo mantener la fe en los hijos, hecha por dos padres de familia, el Papa Francisco resaltó la importancia de que los padres se amen, porque los niños deben poder “sentir que mamá y papá se quieren mucho. Si pelean, no lo hagan delante de los niños”.

El Santo Padre también resaltó la importancia de dialogar con los hijos: “Nunca dejen de hablar con ellos. La educación se hace con el diálogo, nunca los dejen solos. Háganlos comprender que pueden hablar de todo”.

Antes de retirarse, el Papa Francisco regaló algunos rosarios y una imagen de la Virgen María con el Niño Jesús.

¿Qué es la Escuela de Oración?

Esta ha sido la tercera cita del Pontífice de la llamada “Escuela de Oración”, una iniciativa impulsada desde el Vaticano en el marco de este Año de Oración y en preparación para el Jubileo 2025.

A través de este proyecto, el Papa Francisco mantendrá diferentes encuentros “con algunas categorías de personas para orar juntos incluyendo algunas formas de oración”.

Según explicó a ACI Prensa en enero de este año Mons. Fisichella, estos encuentros de oración “dependerán de los compromisos del Papa Francisco y posiblemente contarán con personas y familias de la Diócesis de Roma”.