"Estamos viviendo muchas fragilidades físicas, psíquicas, espirituales, vinculares. Nos extrañamos mucho, tenemos ganas de volver a la cotidianeidad que teníamos antes de este virus. Pero se ha salido con buen criterio a la comunidad para contribuir con la felicidad que es lo que anhelamos en medio de tanta adversidad" comenzó relatando el párroco asegurando que la iglesia "no se quedó en el molde". 

Desde el canal de YouTube, a través de Tik Tok o colocando el altar sobre el verde césped el Padre Juanjo, como lo llaman, busca llegar a la comunidad necesitada. 

"Uno extraña poder abrir el templo, ver a los niños con sus abuelos pero nos tenemos, sabemos que estamos el uno con el otro y vamos peregrinando para adelante. Estamos en un momento complejo de carencias pero para el creyente saber que la iglesia está viva da alegría" manifestó el religioso. 

Tiempos difíciles y prolongados donde hubo necesidades desde lo sanitario hasta lo económico, alimentario pasando inclusive por la contención, en esta segunda ola el Padre señaló que "podemos sacar dos conclusiones. La primera es una desesperanza porque anhelábamos que este año sea distinto y lo vivimos igual o peor que el año pasado; pero después con el alcohol al 70, los vecinos que se van acercando y las redes sociales hay una madurez, una resistencia madura" aseguró añadiendo que "vamos a salir, es posible dar una vuelta de hoja con todo esto". 

La necesidad del mensaje positivo hoy es por lo que brega la iglesia "Los creyentes sabemos el final de la película Jesús vence, va a vencer ante toda complejidad humana. Para todos es difícil porque el critiano es humano, pero el señor viene a traer la paz y vamos a poder salir adelante". 

Asimismo emitió "Un mensaje de esperanza, hay mucha soledad, carencias, pero no estamos solos. Muchos y muchas estamos orando pidiéndole a Dios paz y fortaleza" expuso apuntando inclusive a aquellos que no son creyentes. 

El Padre Juanjo reconoció también que muchas personas se reencontraron inclusive desde la virtualidad con la fe, contando más de una anécdota. 

Para cerrar el religioso emitió una oración para todos los vecinos y vecinas de la ciudad de Berisso.