En la mesa de reflexión "La Argentina que queremos", los responsables del Observatorio de la Deuda Social dieron detalles de los resultados y hubo debate con referentes de diversos sectores.
El Observatorio de la Deuda Social Argentina de la Universidad Católica Argentina (ODSA UCA) dio a conocer sus informes sobre pobreza y empleo de 2022 “Deudas sociales en la Argentina urbana 2010-2022". De acuerdo con estos resultados, 43,1% de las personas son pobres por ingresos en el país, mientras que un 8,1% se encuentra en la indigencia. La Encuesta de la Deuda Social Argentina, realizada por el ODSA, mide la pobreza multidimensional y por ingresos, así como las características del mercado de trabajo en la población urbana correspondiente al tercer trimestre de 2022.
El informe fue presentado por el director de Investigación del Observatorio, doctor Agustín Salvia, en la mesa de reflexión "La Argentina que queremos". Lo acompañaron la ministra de Desarrollo Humano y Hábitat de la Ciudad de Buenos Aires, María Migliore; el exministro de Producción y Trabajo de la Nación, Dante Sica; y el ex viceministro de Economía y Finanzas de la Nación, Emmanuel Álvarez Agis.
Entre los presentes, se encontraron las autoridades de la Universidad: el rector, doctor Miguel Ángel Schiavone; la vicerrectora de Investigación e Innovación Académica, doctora Clara Zamora; el secretario académico, doctor Gabriel Limodio, y el administrador general, doctor Horacio Rodríguez Penelas.
También asistieron dirigentes políticos y sociales, entre ellos, la diputada Graciela Camaño y el diputado mandato cumplido Eduardo Amadeo; el director del Banco Hipotecario, Rodrigo Ruete; el director general de Estadística y Censos de la Ciudad de Buenos Aires, José Donati, y el director de Cáritas Argentina, Nicolás Meyer.
El inicio del acto estuvo a cargo del rector de la UCA, quien reflexionó sobre cómo la pobreza creció del 6% en 1974 a 43,1% en la actualidad. “La pobreza no es solamente económica, veamos la pobreza en el ámbito laboral, en el ámbito educativo”, subrayó, y señaló la importancia de que la dirigencia del país tenga los valores de la legalidad, legitimidad, idoneidad y honestidad. Por último, interpeló al público: “¿Qué hicimos cómo sociedad para tener este número?, ¿qué vamos a hacer cuando salgamos de este auditorio?”.
Tras las palabras del rector, se proyectó un video en el que se presentaron los principales resultados del informe. Luego, el doctor Salvia hizo una pregunta como disparador a los invitados: ¿cómo hacemos para cambiar esto?
María Migliore afirmó que ver los números del informe la interpelaba a seguir trabajando. “La pobreza es algo persistente y estructural y nos obliga a la dirigencia a pensar qué hacer distinto para solucionar estos problemas”, dijo e invitó a “construir diagonales que nos permitan crear un sistema para poder crecer”. Migliore remarcó que la política económica y la social son dos partes de un mismo proceso y concluyó: “Hay que animarnos a mirar a los problemas de frente y construir soluciones distintas. A compartir causas más allá del espacio que cada quien representa y transitar caminos que nos permitan dar soluciones concretas”.
Por su parte, Emmanuel Álvarez Agis sostuvo que el informe tocaba muchos puntos y que eso es un “acierto porque si no parecería que la pobreza es un área más de la economía”. Propuso tres ejes de reflexión. “El primero es un eje más político que económico: desterrar las categorías que cancelan la discusión, de que allá están los enemigos”, dijo. En segundo lugar, pidió buscar una nueva estructura tributaria y fiscal, que no se base en “no subir nunca más los impuestos ni en subir los gastos todo lo que sea necesario”. Por último, mencionó la importancia de construir un consenso respecto del modelo de crecimiento.
Finalmente, Dante Sica instó a tener “un debate distinto” y a “no utilizar la pobreza para correr al otro”. Enfatizó en la ausencia de una visión de desarrollo del país e indicó: “Los resultados no dejan lugar a dudas de que no es responsabilidad de una fuerza política, sino de todas las fuerzas políticas”. En ese sentido, afirmó que ese compromiso no comprende solo a los partidos políticos, sino también a las instituciones, cámaras empresariales y los sindicatos, entre otros actores políticos y sociales.
A continuación, se invitó a estudiantes de la Facultad de Ciencias Económicas y de la Facultad de Ciencias Sociales de la UCA y a jóvenes representantes de la Juventud Sindical de la CGT, de Cáritas y de la Unión de Trabajadores y Trabajadoras de la Economía Popular (UTEP) a formular preguntas a los expositores.
El doctor Salvia reflexionó en el cierre sobre la pobreza en el país. “Un aspecto que me parece claro es que con macroestabilidad y crecimiento no es suficiente para resolver las deudas sociales”, afirmó. En segundo lugar, invitó a pensar cómo construir un mejor Estado con capacidad de representar al conjunto social. “No es cuánto más Estado o cuánto más mercado, sino cuánto mejor Estado y cuántos mejores mercados”, agregó. Enumeró también los desafíos que implican los cambios tecnológicos a nivel global y destacó que la economía social debería incorporar más tecnología. En quinto lugar, mencionó la importancia de un pacto social distributivo, que en definitiva es “un pacto político”. Por último, se refirió a la inversión en capital humano y concluyó: “¿Cómo invertimos en capital humano? Con más trabajo. La pobreza es la devaluación del capital humano”.
Principales resultados del informe
El 32,7% de los hogares y 43,1% de las personas se encuentran bajo la línea de la pobreza en el país. En comparación con las cifras del año pasado, cuando el porcentaje de pobreza fue 42,4%, el avance del informe “Pobreza multidimensional y pobreza por ingresos desde un enfoque de derechos sociales. Argentina Urbana 2010-2021” da cuenta de un aumento de 0,7 puntos porcentuales en 2022. El reporte señala, además, que entre julio y octubre de este año el 5,7% de los hogares y 8,1% de las personas eran indigentes.
De acuerdo con los resultados del informe “Trabajo, empleo, inactividad forzada y exclusión social. Argentina Urbana 2010-2022”, la tasa de empleo subió del 58,8% registrado en 2021 a 64,3 % este año. Solo el 40,3% de la población económica activa de 18 años y más logró acceder a un empleo pleno de derechos, mientras que el 8,7% de esta población se encontraba abiertamente desempleada y el 23,0% sometida a un subempleo inestable, es decir, realizando changas, trabajos temporarios o no remunerados o siendo beneficiarios de programas de empleo con contraprestación. Al mismo tiempo, el 28,0% contaba con un empleo regular, pero precario, con niveles de ingresos superiores a los de subsistencia y sin afiliación al sistema de seguridad social.
Por otro lado, si en 2021 la tasa de desocupación fue de 9,1%, la posterior reactivación generó que este año la desocupación disminuyera al 8,7%. Entre otros datos, recolectado por la Encuesta de la Deuda Social Argentina de la UCA entre julio y octubre de 2022, se señala también que aproximadamente un 50% de la población activa no posee un empleo con plenos derechos laborales.
Acceso al informe de avance “Deudas sociales en la Argentina urbana 2010-2022".
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