Varios países islámicos condenaron el atentado terrorista perpetrado contra una iglesia del complejo eclesiástico donde se encuentra la catedral cristiana copta de El Cairo, en el barrio de Al Abasiya y en el que murieron al menos 25 personas.
El presidente libanés, Michel Aoun, expresó sus condolencias a su homólogo egipcio, Abdelfatah al Sisi, por las víctimas del atentado contra una iglesia en el Cairo.
Aoun aseguró en un comunicado que el Líbano se solidariza con el pueblo egipcio "hermano" tras ese "horrible crimen terrorista que conmociona la conciencia humana".
Por otra parte, el Gobierno de Arabia Saudita condenó "en los términos más enérgicos" la explosión que tuvo lugar en una iglesia del complejo eclesiástico donde se encuentra la catedral cristiana copta de El Cairo, en el barrio de Al Abasiya.
En un comunicado citado por la agencia de noticias oficial, SPA, el Gobierno saudita señaló que "este acto cobarde de terrorismo contraviene la religión islámica y el resto de las religiones, los valores y los principios humanitarios, y las normas y convenciones internacionales."
La Cancillería Iraquí, a través de su vocero, condenó firmemente el atentado perpetrado contra la comunidad copta en Egipto.
Por su parte, el Gobierno yemeni, condenó el atentado a través de su cancillería reiterando su rechazo de todas las formas de terrorismo.
Asimismo, el Gobierno de los Emiratos Árabes Unidos, condenó el atentado a través de su embajador en Egipto, Yumua Mubarak Al Yunaibi.
De igual manera, Jordania, el Consejo de Cooperación del Golfo (CCG), y la Organización de Cooperación Islámica (OCI), emitieron comunicados de condena y rechazo del terrorismo.
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