La nueva edición de esta manifestación de fe popular llevó por lema ¨Madre, danos tu mirada para vivir como hermanos¨, y la lluvia que sorprendió a los peregrinos en el último tramo del camino obligó a celebrar la misa concelebrada dentro de la basílica.

Una multitud de personas participó este fin de semana de la 42° Peregrinación Juvenil a pie a Luján, donde el arzobispo de Buenos Aires, cardenal Mario Aurelio Poli, pidió “hacer algo” por los pobres, exhortó a “no ser indiferentes” ante la pobreza y llamó, como el papa Francisco, a “echarse la patria al hombro”. 

La nueva edición de esta manifestación de fe popular llevó por lema "Madre, danos tu mirada para vivir como hermanos", y la lluvia que sorprendió a los peregrinos en el último tramo del camino obligó a celebrar la misa concelebrada dentro de la basílica y no en la Plaza Belgrano como está previsto. 

“Ante la Virgen que viste los colores de la patria renovemos el deseo de un encuentro fraterno de los argentinos y, si podemos, hacer algo por los pobres, especialmente con los que pasan a nuestro lado, no seamos indiferentes”, sostuvo y agregó: “Si podemos, compartir algo con ellos, hagámoslo, eso es también es echarse la patriar el hombro”. 

“Uno podía decir: ‘Que es una gotita en tanta pobreza y tantos pobres’. La Madre Santa Teresa de Calcuta decía que de gotitas están hechos los océanos. Echémonos la patria al hombro, que el Señor y la Virgen de Luján nos ayuden en este buen propósito”, insistió el cardenal Poli. 

El purpurado porteño destacó el “mensajito” que el Papa envió el viernes a los argentinos, sobre todo la frase que el pontífice llama a “echarse la patria al hombro”. 

“Muchas veces aquí lo escuchamos al cardenal (Jorge) Bergoglio decir esta frase. Y uno no tiene que decir, que sean los de arriba, cada uno de nosotros, los que amamos esta patria, nos echamos la patria al hombro”, insistió en pedir. 

El cardenal Poli pidió también a los peregrinos encomendarse al Negro Manuel, que “cuidó” a la imagen de la Virgen y al padre Jorge María Salvaire, el sacerdote vicentino que mandó a construir la basílica, al recordar que “ahora son siervos de Dios y van caminito a los altares”. 

La misa fue concelebrada por el arzobispo de Mercedes-Luján, monseñor Agustín Radrizzani SDB y el obispo de Avellaneda-Lanús, monseñor Rubén Frassia, además de otros prelados de la Región Buenos Aires. 

La Comisión Arquidiocesana de Piedad Popular, a cargo de organización, prefirió no hablar de la cantidad de devotos que participaron, sino de “un mar de vida” y “una corriente imparable” de peregrinos. 

A las 6.36 ingresó a la basílica la “imagen cabecera” de la Virgen llevada por el grupo de peregrinos que salió ayer al mediodía del santuario de San Cayetano de Liniers. 

A lo largo del camino, los peregrinos rezaron a cada hora un Avemaría por la Patria, oración que fue coordinada a través de las redes sociales. 

Uno de los momentos culminantes de la peregrinación se produjo a la hora cero de este domingo, cuando los peregrinos encendieron una vela para “iluminar el camino” a la Virgen. 

La peregrinación se vivió en las redes sociales, donde los jóvenes dejaban las sensaciones que tenían tras haber caminando 60 kilómetros para pedirle y agradecerle a la Virgen patrona de los argentinos, con las consignas: #Lujan2016, #Caminemosjuntos y #SelfieconlaVirgen.