Entre el silencio del seminario y la alegría de los sacerdotes y seminaristas de San Juan, se vivió ayer la primera visita de monseñor Jorge Lozano, después de que fuera nombrado arzobispo coadjutor de la provincia. El objetivo de este primer encuentro fue enseñarle a Lozano cómo está formada la diócesis sanjuanina, la realidad de cada parroquia y quiénes son los representantes de algunas instituciones como Cáritas o la Pastoral del Servicio Penitenciario. Durante estas charlas, los decanos (curas que representan las zonas en las que está dividida la Iglesia local), expusieron como principal problema la falta de seguridad. ‘Estoy viviendo días muy intensos y lindos. En San Juan no conozco a nadie, sólo a monseñor Alfonso Delgado. Estoy acá para aprender‘, dijo Lozano a DIARIO DE CUYO. 

El religioso llegó a San Juan para un coloquio en la Unión Industrial (ver aparte), pero su ministerio episcopal iniciará el próximo 4 de noviembre. Ahí comenzará a trabajar como arzobispo coadjutor. Es decir, acompañará a monseñor Alfonso Delgado hasta que este cumpla los 75 años y renuncie (2017). En ese momento Lozano se convertirá en el nuevo arzobispo de San Juan.

El primer encuentro con la curia local comenzó pasada las 9 de la mañana. Muchos pensaron que el arzobispo coadjutor iba a ser el principal orador, pero eso no sucedió. Es que dedicó gran parte de su tiempo a escuchar la realidad de San Juan. Los actos vandálicos que suceden con imágenes religiosas y los robos que tienen como víctimas a algunas parroquias y capillas, fueron los temas más charlados, según dijeron algunos sacerdotes. Ellos destacaron que la reunión fue para empapar a Lozano de San Juan, pero no se tocaron temas pujantes como la minería. En este sentido el arzobispo coadjutor prefirió no dar opiniones del derrame de Veladero. ‘Me enteré por los medios, pero sería irresponsable de mi parte opinar del tema‘, dijo Lozano y contó que estaba contento con el recibimiento que tuvo y por el ‘hermoso‘ clima. 

‘Tuvimos un charla muy breve. Estaba interesado en saber de nosotros‘, dijo Rómulo Cámpora, uno de los 60 sacerdotes que participó de la reunión. Por su parte, el padre Francisco Martín contó que durante su presentación les destacó que no llegará a la provincia con ningún plan preestablecido, sino que vendrá dispuesto a saber qué necesitan. ‘Nos dijo que no viene a imponer nada, viene a escucharnos. Mostró una actitud de servicio y de apertura. Se habló de deserción escolar, pobreza e inseguridad‘, dijo Martín y puso como ejemplo el robo del Sagrario en la capilla del barrio Rivadavia Norte. 

‘Hubo algunos que contaron la realidad de cada parroquia hasta power points‘, dijo José Cardozo, el cura que es asesor de la Pastoral Juvenil. Por su parte, Delgado, que mantuvo una charla extensa con Lozano, contó que este encuentro se dio en el marco de un plenario que se hace todos los meses. ‘Esta vez se habló de cuántas parroquias tenemos, cuáles son las que están en zonas más residenciales y también las que están en zonas más problemáticas como las de Chimbas, que tienen conflictos casi todos los días. Algunas parroquias están sufriendo mucho la inseguridad y el vandalismo y eso es parte de lo que se le contó a Lozano‘, dijo el arzobispo sanjuanino.