El obispo auxiliar de Río Gallegos, monseñor Fabián González Balsa, fue elegido administrador diocesano de esta jurisdicción eclesiástica, hasta tanto el Papa Francisco designe a un nuevo obispo para esta diócesis patagónica.

La decisión se adoptó durante una reunión del Consejo de Consultores / Presbiteral, a raíz de la promoción como arzobispo de Buenos Aires del anterior diocesano, monseñor Jorge García Cuerva.

"Recemos por este tiempo providencial", se pidió en la comunicación oficial, firmada por el presbítero Fabián Gilli.

Fabián González Balsa nació el 17 de agosto de 1968 en Buenos Aires; fue ordenado diácono el 19 de marzo de 1994 por el entonces monseñor Jorge Bergoglio SJ -hoy Papa Francisco-, y el 26 de noviembre de ese mismo año recibió la ordenación sacerdotal de manos del cardenal Antonio Quarracino.

Tras cumplir funciones pastorales en la arquidiócesis de Buenos Aires desde 1994 hasta 2001, monseñor Bergoglio lo envió como misionero a la diócesis de Río Gallegos. En 2012, volvió a Buenos Aires y permaneció allí hasta 2018, cuando regresó a la diócesis austral.

El 11 de mayo de 2022, el pontíficie lo nombró obispo titular de Mascliane y auxiliar de Río Gallegos, y recibió su ordenación episcopal el 17 de septiembre de ese año.