Esta casa es un espacio para que los jóvenes de los Hogares de Cristo y los centros Barriales profundicen su desarrollo de la vida personal y espiritual. En este espacio del obispado conviven los jóvenes con un equipo de profesionales de múltiples disciplinas que acompañan a los jovenes, especialmente aquellos con consumos problemático.

El padre Hernán David dió la bienvenida a Mons Mestre y agradeció su personal trabajo para la recuperación de la granja.

Durante la celebración religiosa Cesar, uno de los jóvenes de La Casa recibió el sacramento del bautismo y la imposición de la bendición del obispo, los sacerdotes y sus padrinos.

Homilía

En su homilía Mons Mestre reflexiona sobre la tierna relación entre Jesús y su Madre la Virgen María.

«En esta referencia a la escucha y la vivencia de la Palabra se fundamenta el trabajo apostólico de esta granja. Nuestro destino último está en el cielo junto a Cristo. En esta Casa aspiramos a restaurar y sanar los vínculos, desde la dinámica espiritual de Cristo que no solo sana sino que además salva. Aquí experimentamos la vida espiritual junto al esfuerzo terrenal de la convivencia. Está es la dinámica que nos propone la víspera de la fiesta de la Asunción» finalizó Mons Mestre.

Al término de la ceremonia religiosa Mons Mestre bendijo las instalaciones y las personas que trabajan y viven aquí. También agradeció el trabajo de los voluntarios que llevan adelante está tarea apostólica.