Los restos de las cuatro víctimas mortales del atentado al supermercado judío de París el pasado viernes llegaron hoy a Jerusalén para ser enterrados en un funeral oficial que finalmente tendrá lugar en el cementerio de Givat Shaul y no en el del Monte de los Olivos, como estaba previsto.
Los restos de las cuatro víctimas mortales del atentado al supermercado judío de París el pasado viernes llegaron hoy a Jerusalén para ser enterrados en un funeral oficial que finalmente tendrá lugar en el cementerio de Givat Shaul y no en el del Monte de los Olivos, como estaba previsto.
El avión de la compañía israelí El Al que traslado los restos de Yoram Cohen, Philippe Barham, Yoav Hatab y Francois Michel Saada, acompañados de sus familiares, aterrizó en el aeropuerto de Ben Gurión, cerca de Tel Aviv, antes del amanecer, informaron medios locales.
El entierro tendrá lugar a mediodía hora local en el cementerio más grande de la ciudad, en una ceremonia que contará con la participación del presidente Reuvén Rivlin, el primer ministro Benjamín Netanyahu, ministros, diputados y grandes rabinos.
En un principio se había anunciado que los cuatro serían sepultados en el emblemático cementerio del Monte de los Olivos, el camposanto judío más antiguo del mundo aún en uso y que se encuentra en Jerusalén Este frente al Monte del Templo o Explanada de las Mezquitas.
Para cualquier seguidor de la fe mosaica, ser enterrado allí es considerado un privilegio por su proximidad al lugar donde hace 2000 años se alzó el templo de Jerusalén, y debido al limitado espacio para los enterramientos sólo las personas adineradas o con un reconocido estatus son sepultadas en este cementerio.
Finalmente, las autoridades decidieron que fueran enterrados en el cementerio que se encuentra en un monte a la entrada de la ciudad santa.
Según un comunicado oficial, la ceremonia se celebrará de acuerdo al más estricto rito religioso judío, con la lectura de salmos por el gran rabino sefaradí Itzjak Yosef, el kadish u oración fúnebre por algún miembro de la familia, honras fúnebres por el rabino jefe de Jerusalén, Shlomo Amar, y el encendido de cuatro velas por sus almas.
A continuación el jefe del Estado israelí, el primer ministro, el jefe de la oposición, Itzjak Herzog, y la ministra de Ecología y Energía, Segolene Royal, que representará al Gobierno francés, pronunciarán breves discursos.
La ceremonia, que será transmitida en directo por las televisiones locales, concluirá con el himno israelí, tras lo cual las cuatro víctimas serán llevadas a su lugar de enterramiento en un acto más privado.
Aunque los cuatro fueron trasladados desde París en féretros, la tradición judía establece el enterramiento en contacto directo del cuerpo con la tierra.
Sin embargo, en este caso podría aplicarse una dispensa especial que permite el uso de féretros en casos en los que el cadáver haya sido víctima de extrema violencia y pueda estar seriamente dañado, con el fin de aliviar a la familia imágenes poco agradables.
El asesinato de los cuatro miembros de la comunidad judía francesa en la cadena de atentados islamistas de la semana pasada en París coincide con la campaña en Israel de cara a las elecciones anticipadas del 17 de marzo.
Comentaristas locales y políticos no han dudado en criticar a Netanyahu, que aspira a la reelección, así como al titular de Asuntos Exteriores, Avigdor Lieberman, y el de Economía, Naftalí Bennet, de haber aprovechado el dolor de las víctimas para hacer campaña mediante su desplazamiento a Francia para la multitudinaria manifestación del domingo.
Comentá la nota