Con limitaciones, en setiembre volverían las celebraciones en los templos de la Ciudad

Con limitaciones, en setiembre volverían las celebraciones en los templos de la Ciudad

Sería con un máximo de 40 personas, sin exceder el 25 % de la capacidad del lugar. Cada confesión diseñará un protocolo según sus ritos. Fue acordado por el jefe de Gobierno porteño con los líderes religiosos locales. Ahora debe aprobarlo la Casa Rosada.

Sergio Rubin

Después de más de cinco meses de haber estado suspendidas volverían en los primeros días de setiembre las celebraciones en los templos de los diversos cultos de la ciudad de Buenos Aires, pero solo se permitiría un máximo de cuarenta fieles, siempre que esa cantidad no supere el 25 % de la capacidad del lugar.

La nueva flexibilización –tras la apertura de los templos con un máximo de diez fieles que rige desde el 22 de julio- fue analizada este jueves por el jefe de Gobierno, Horacio Rodríguez Larreta, con los líderes religiosos de la ciudad, y solo resta que sea elevada al Poder Ejecutivo nacional para su aprobación.

Así lo revelaron a Clarín fuentes del Gobierno de la Ciudad, quienes precisaron que cada culto elaborará un protocolo acorde con su rito –por caso, la Iglesia católica daría únicamente la comunión en la mano, no en la boca-, pero se mantendrá el uso del tapaboca, el alcohol en gel y la distancia social.

A mediados de julio, el arzobispo de Buenos Aires, cardenal Mario Poli, y el gran rabino de la AMIA, Gabriel Davidovich, entre otros dignatarios, había difundido una dura declaración por la persistencia del cierre de los templos y la veda de los oficios, en la que denunciaban que “se quiere invisibilidad a Dios”.

Mientras en el conurbano los templos siguen oficialmente cerrados –aunque algunos abren unas horas-, en muchas provincias se inició un proceso de apertura de templos y vuelta de las celebraciones con protocolos que en el caso de los católicos incluyeron que la hostia solo podía darse con la mano.

Esta última prescripción provocó una insólita protesta en la diócesis mendocina de san Rafael, donde unos 40 sacerdotes –la mitad de su clero- y un grupo de fieles reclamaron poder darla y recibirla en la boca llegando a protestar delante el seminario local –epicentro de la resistencia- que determinó su cierre.

El Gobierno porteño informó que Rodríguez Larreta, el secretario general, Fernando Straface, y el director de Entidades y Cultos de la Ciudad, Federico Pugliese, analizaron con líderes religiosos “la propuesta a la tercera fase que analiza un eventual regreso de las celebraciones religiosas con aforo y tope".

“Rodríguez Larreta agradeció el compromiso de las diversas comunidades de fe en la Ciudad e invitó a los líderes religiosos a continuar analizando juntos los próximos pasos para una apertura gradual en el marco del Plan Integral y Gradual de Puesta en Marcha de la Ciudad”, señala el comunicado.

Agrega que “los referentes religiosos destacaron la prioridad dada por el Jefe de Gobierno a la dimensión espiritual dentro del Plan de Puesta en Marcha de la Ciudad y se mostraron satisfechos por la apertura gradual de los templos con un máximo de 10 personas habilitado desde el 22 de julio".

Po su parte, Pugliese dijo en el gobierno “seguimos comprometidos con las comunidades de fe para seguir dando pasos de manera responsable y pensar juntos la vuelta a la ‘nueva normalidad’ porque creemos que la dimensión espiritual es clave para muchas vecinas y vecinos de la ciudad”.

De la reunión participaron el cardenal Aurelio Poli (por Zoom); y de modo presencial el rabino Davidovich; el obispo auxiliar de Buenos Aires, Enrique Eguia Seguí; los presidentes de la AMIA, Ariel Eichbaum, presidente de AMIA; del Seminario Rabínico Latinoamericano, rabino Diego Vovchuk, y del Centro Islámico de la República Argentina, Aníbal Bakir.

También asistieron Alfredo Salas, de la Iglesia de Jesucristo de los Santos de Los Últimos Días; el pastor Osvaldo Carnival, de la Iglesia Catedral de la Fe y miembro de la Alianza Cristiana de Iglesias Evangélicas (ACIERA), y el pastor Norberto Saracco, de la Iglesia Buenas Nuevas y miembro del Consejo de Pastores de la Ciudad de Buenos Aires.

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