"Con gran alegría recibimos la bendición del Papa Francisco, y estamos convencidos que llevará la voz de los trabajadores ladrilleros por todo el mundo, y los convocará a organizarse", expresaron desde la Uolra, organización que los nuclea.

"Francisco fiel a su prédica de una iglesia del lado de los más humildes, de los descartados del mundo, de los que sufren el atropello de un sistema que olvida y excluye, recibió en sus manos la piedra basal para continuar con la construcción de la herramienta organizativa de los trabajadores ladrilleros", destacaron.

Enrique Palmeiro de Scholas Ocurrentes, Guido Savall del Movimiento Misioneros de Francisco y Paula Vicari, fueron quienes llevaron el ladrillo bendecido por el Papa. "Este ladrillo representa el fruto del esfuerzo diario de miles y miles de trabajadores ladrilleros de la economía popular, que pese a la difícil situación que golpea al sector se vienen organizando para nunca más ser invisibles ni para el sistema ni para el Estado", señalaron.

"Hoy la Uolra se viene organizando con el protagonismo de los trabajadores, no sólo de los trabajadores con patrón, sino que también con los trabajadores ladrilleros de la economía popular, que han aprendido el oficio de generación en generación y que representan a la gran mayoría en la actividad", agregaron en un comunicado enviado a AHORA.