Monseñor Gustavo Zanchetta pidió y convocó a la paz social en el contexto del conflicto que acaece en El Tabacal y señaló que el camino al diálogo debe primar ante todo. A su vez, desmintió que haya un caos en Orán, tal como había denunciado la patronal del ingenio.

"Pienso que si no se arriba a un acuerdo entre ambas partes, habrá que apelar a uno de los tres poderes del Estado para que tome cartas en el asunto y tenga la última palabra", sugirió el sacerdote, en lo que concierne al desarrollo y a las etapas de este conflicto que parece no tener fin.

Por otra parte, cuestionó la manera en que gestiona la empresa que tiene a su cargo la administración del ingenio. "Ellos deben entender que no todo se puede hacer desde Buenos Aires. hay cosas que se deben hacer acá. Los empleados azucareros necesitan hablar con las máximas autoridades y no con sus representantes", evaluó.

Por otro lado, al momento de referirse al proceso de negociación aseguró que no se vivió un clima de violencia, sino que prevaleció la seriedad, el respeto y la cordialidad. "No hay peligro para que nadie se siente a dialogar", cerró.