Por David Ramos

En diálogo con ACI Prensa el 4 de noviembre, Mons. Castro indicó que “de lo que sí estamos todos convencidos es que no deben aparecer ni la ideología de género ni un énfasis tan raro en lo que es el género, como si fuera identificado solo con la mujer”, en el acuerdo de paz.

El Prelado colombiano señaló que “esa es una formación muy típica de donde nació la ideología de género y donde ha tomado fuerza, por ejemplo en Francia, pero que no nos convence ni convence a la guerrilla, la cual estuvo de acuerdo con nosotros en que este punto fue uno de los que más perjudicó al acuerdo para que la gente votara que ‘No’”.

El 2 de octubre de este año, por un pequeño margen, se impuso el “No” a los acuerdos de paz negociados en La Habana entre el gobierno de Colombia y las FARC, desde 2012. Diversos expertos coincidieron en que un factor determinante fue el rechazo a la ideología de género incluida en los documentos.

Mons. Castro señaló que “es mejor que eso desaparezca en el nuevo acuerdo y yo creo que también el gobierno está convencido de ello”.

El Presidente de la CEC señaló que recientemente algunos obispos colombianos se reunieron tanto con las FARC en La Habana como con representantes del gobierno.

En su reunión con la guerrilla, el 1 de noviembre, “tuvimos un diálogo muy interesante sobre el nuevo acuerdo de paz” y destacó como “positivo” que las FARC estén “muy seguras de que todo esto se va a lograr”.

“También positivo me pareció que están muy dispuestos a decir la verdad de todo lo que tengan que dar razón”, señaló.

Por su parte, el gobierno se reunió con los obispos para compartirles los alcances de su diálogo con los principales críticos al acuerdo de paz.

El Prelado señaló que “el ambiente también fue positivo, hubo muchos puntos en los que hay un acercamiento bastante interesante. Algunos un poco menos, pero yo creo que la atmósfera general es que sí se puede llegar a algún acuerdo”.

“Yo espero que para el mes de diciembre ya esté firmado este acuerdo”.

Mons. Castro destacó el trabajo de la Iglesia en todo este camino, pues “hemos trabajado mucho por la paz, hemos ayudado a las víctimas en los diálogos en La Habana y hemos seguido todo el drama de ellos, y seguimos todo el proceso de paz porque es importantísimo que estemos ayudando, orientando, especialmente en estos elementos espirituales que son tan fundamentales”.

“Eso de que queremos llegar a un acuerdo de paz, pero sin reconciliación, es como construir una casa sobre la arena. El perdón y la reconciliación son fundamentales en este caso”, precisó.

Para el Presidente de la CEC, es importante “invitar a toda nuestra gente a orar, a interesarse por la paz y a ser constructores de paz”.

“Por eso es tan importante el énfasis nuestro en la familia, que es la escuela de virtudes, la verdadera educadora de paz, en todo el planeta, en cualquier parte que sea”, dijo.