En la última jornada de la Semana Social, organizada por la Comisión Episcopal de Pastoral Social (Cepas) en conjunto con el Obispado de Mar del Plata, el secretario ejecutivo de la comisión episcopal de pastoral social, el padre Adalberto Odstricil hizo lectura del mensaje final del encuentro, el cual, señaló, tuvo la intención de “promover un espacio de diálogo para crecer en la amistad social, reconociendo que es más lo que nos une que lo que nos divide”.

Luego de la realización de los últimos dos paneles del encuentro, desarrollados bajo los nombres de “Testimonios encarnados de la amistad social” y “La amistad social en los movimientos sociales y en las organizaciones de la sociedad civil”, tuvo lugar sobre el mediodía la tradicional Misa de cierre presidida por monseñor Jorge Casaretto.

Previo al comienzo de la misma, el padre Odstricil compartió el mensaje final del encuentro, en el cual celebró que todos los asistentes hayan podido “reflexionar sobre varias cuestiones vinculadas al cuidado de la creación”, además de los temas abordados en las diversas mesas de trabajo, “vinculados al tratamiento de los residuos, energías renovables, agroquímicos, agua y minería”, señaló, a modo de repaso.

Sostuvo, a su vez, que el papa Francisco “con insistencia nos impulsa a buscar nuevos estilos de desarrollo que sean amigables con el ambiente y solidarios con los pobres”.

“Es fundamental promover un cambio de paradigma y de mentalidad. Sabemos que estamos atravesando una grave crisis socioambiental, que impacta especialmente en los pobres. Nos hemos adentrado en las iluminadoras enseñanzas de la Encíclica Laudato Si'”, advirtió.

Haciendo hincapié en el lema del encuentro, “La Amistad social y el cuidado de la Casa común”, el religioso celebró la participación de “representantes del ámbito sindical, entidades empresarias, movimientos populares, delegados de diversas pastorales nacionales, equipos diocesanos y dirigentes políticos y de las organizaciones de la sociedad civil”.

También destacó que “el trabajo volvió a ocupar un lugar importante en varios paneles”, dando cuenta de que la cuestión del empleo resulta ser uno de los ejes principales de los encuentros de la Pastoral.

“Tuvo eco en nuestros corazones la angustia que atraviesan familias de desocupados o subempleados. Tuvimos también en cuenta a quienes no tienen seguridad social ni un trabajo debidamente registrado”, describió.

Destacó también que, en varias oportunidades, tuvo lugar “la importancia del diálogo y la cultura del encuentro como caminos para lograr el clima necesario para alcanzar los consensos que permitan encontrar las soluciones anheladas”.

“La Argentina es el lugar que amamos, este es el pueblo al que pertenecemos. Aquí queremos vivir, crecer y soñar en nuestra casa común. Para ello es necesario ponernos la Patria al hombro. Comprometiéndonos cada uno desde el lugar que estamos, globalizando la solidaridad. Con confianza llevamos al corazón de la Virgen de Luján los dolores y esperanzas de todo nuestro Pueblo”, concluyó.

La importancia de la “amistad social”

Durante la mañana de ayer, tuvieron lugar las últimas dos sesiones del encuentro bajo el nombre de “Testimonios encarnados de la amistad social” y “La amistad social en los movimientos sociales y en las organizaciones de la sociedad civil”.

Ambos paneles estuvieron enfocados en la importancia del compromiso de todos los fieles con el buen desarrollo de la comunidad en general y de los resultados exitosos que pueden surgir de dicha articulación de voluntades.

La primera mesa estuvo conformada por Franklin Rawson, padre de la adolescente víctima de un femicidio, Angeles Rawson y referente de la organización de protección a familiares de víctimas, Usina de Justicia; un integrante del equipo de Prevención Ciudadana -Diócesis de San Isidro, Rodolfo Vignolo; la coordinadora la ONG GAMA, un grupo de autoayuda para el mal de Alzheimer, Cristina Alvarez; el cofundador de Incluyeme.com, un portal de búsqueda laboral para personas con discapacidad, Gabriel Marcolongo; el concejal por la UCR de Alta Gracia, Córdoba, Roberto Brunengo; una integrante del equipo No a la Trata de Justicia y Paz, Nancy Monzón; el presidente de RIEL, la agrupación política que cuenta con el apoyo de emprendedores laudatistas y organizaciones sociales, Federico Cuomo.

Por otra parte, el segundo panel trató la importancia de articular las demandas y trabajos de los movimientos y organizaciones sociales con el de la “Iglesia en movimiento”.

Del mismo participaron el coordinador nacional de la agrupación Barrios de Pie, Daniel Menéndez, uno de los referentes de Justicia y Paz, Fernando Granda; el dirigente de los movimientos cooperativos, Edgardo Form y la ex legisladora por el Movimiento Evita, Adela Segarra (Movimiento Evita). Para esta sesión estaba prevista la participación del ministro de Gobierno bonaerense, Joaquín De la Torre, pero “por cuestiones de agenda” el funcionario debió cancelar su intervención a último momento.