Miembros de la Congregación de Rodfei Shalom alertaron al FBI sobre la identidad del hombre acusado por el acto de vandalismo antisemita que ocurrió el miércoles pasado en su comunidad, en el que se encontraron esvásticas y símbolos del Ku Klux Klan pintados en 30 edificios y vehículos. 

El FBI fue notificado por los miembros de la comunidad de Rodfei Shalom, pero hasta el momento, no se efectuó ningún arresto. El buró ofreció una suma de hasta 5.000 dólares a cambio de cualquier información útil para arrestar al sospechoso. 

“Queremos tener toda la información necesaria para determinar si este individuo es en realidad el responsable de este hecho en particular, si es responsable por otros hechos, o si coopera con otras personas”, explicó la agente especial, Michelle Lee, coordinadora mediática del FBI. 

La investigación conjunta entre el FBI; el Departamento de Policía de San Antonio y el cuerpo especial de agentes del Departamento de Seguridad Pública de Texas, los Texas Rangers, se encuentra preocupada de que este acto de odio pueda escalar en un acto más violento. 

“El odio que los inspira a cometer estos actos, en muchos casos, los llevan a cometer actos de violencia física contra las personas. Entonces, es realmente importante que como comunidad declaremos la intolerancia ante este tipo de actos de odio, porque no llevan a ningún lado y terminan lastimando a las personas”, expresó Lee.