El vocero vaticano confirmó que el Papa habló con el presidente palestino, quien destacó la necesidad de que el Vaticano continúe con sus esfuerzos para alcanzar un alto el fuego inmediato.
El Papa Francisco y el presidente palestino, Mahmoud Abbas, mantuvieron una conversación telefónica a raíz de la guerra en Medio Oriente, desatada tras el ataque del grupo terrorista Hamás y la respuesta armada de Israel. Lo confirmó el director de la Oficina de Prensa del Vaticano, Matteo Bruni.
El presidente palestino -según informa la agencia palestina Wafa-, durante la llamada telefónica, expresó su aprecio por el papel y los esfuerzos del pontífice por la construcción de la paz en la región y en el mundo.
Abbas subrayó la importancia vital de que el Vaticano continúe sus diligencias diplomáticas para asegurar un alto el fuego inmediato, subrayando la necesidad de evitar a los civiles los horrores de la guerra.
El líder palestino -informa Wafa- señaló la urgencia de crear corredores humanitarios permanentes, para la entrega de suministros médicos y alimentarios, y servicio de agua y electricidad, a Gaza.
Las preocupaciones del Papa
Desde el inicio del conflicto el 7 de octubre, Francisco ha repetido sus llamamientos a la paz, afirmando la necesidad de alcanzar un alto el fuego, liberar a los rehenes en manos de Hamas y permitir el paso oportuno de la ayuda humanitaria directa a la población de Gaza.
El Papa mantiene contactos permanente con la parroquia de la Sagrada Familia en Gaza, a través del vicepárroco, el padre Youssef Asaad; la hermana Nabila Saleh, de las Hermanas del Rosario de Jerusalén; y del párroco, padre Gabriel Romanelli, quien todavía sigue varado en Belén, debido a la ofensiva israelí.
El pontífice también había mantenido conversaciones telefónicas con el presidente de los Estados Unidos, Joe Biden, y con el presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, durante las cuales reiteró la necesidad para encontrar caminos hacia la paz y la esperanza de poder lograr una solución de dos Estados, con un estatus especial para Jerusalén.
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