El parte matutino de este jueves del Vaticano sobre la salud del Papa sigue siendo tranquilizador. "Durmió bien y ahora está reposando", señala. Ayer se informó que remitió la insuficiencia renal leve y la evolución de la inflamación pulmonar es normal.
“El Papa durmió bien anoche y ahora está descansando”. Esta es la actualización que la Oficina de Prensa de la Santa Sede proporcionó este jueves sobre el estado de salud del Papa Francisco, internado en el Policlínico “Agostino Gemelli” desde el 14 de este mes. En el parte anterior, el miércoles a la tarde informaron acerca de "una ligera mejoría" en todos los aspectos de su cuadro, pero sigue con pronóstico reservado.
"Este jueves, tras despertarse, desayunó, vontinuó el tratamiento prescrito y realizó más pruebas. Continúa con la oxigenación. Está en el sillón. Está informado de las numerosas iniciativas de oración que se están organizando para él. El estado de ánimo del Papa es bueno", completa el portal oficial de noticias de la Santa Sede. La audiencia jubilar del sábado fue cancelada.
El boletín de anoche destacó que "la leve insifuciencia renal detectada en los últimos días remitió" mientras que la tomografía computada de tórax realizada el martes "mostró una evolución normal de la inflamación pulmonar". Además, "los análisis de sangre y las pruebas hematológicas de este miércoles confirmaron la mejoría de ayer".
Consignó, además, que el Papa "continúa con la oxigenoterapia de alto flujo. Tampoco este miércoles presentó una crisi respiratoria asmática y continúa la fisioterapia respiratoria". Y concluida diciendo que "aunque hay una ligera mejoría, el pronóstico sigue siendo reservado".
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