El Presidente del Consejo Federal de la DAIA, Fabián Neiman, dialogó en forma exclusiva con Vis á Vis sobre los últimos hechos de carácter antisemita que sucedieron en todo el país y las amenazas explícitas al presidente de la DAIA, Jorge Knoblovits.
Se refirió específicamente al avance del antisemitismo, enumeró los últimos hechos que afectaron a la comunidad judía en todo el país y brindó su apoyo a Knoblovits.
¿Sentís que hay un avance del antisemitismo en la Argentina?
Yehuda Bauer, uno de los historiadores que mejor pensó la Shoá, dijo que tenemos tres grandes lecciones para aprender del horror nazi de los años ’30 y ’40: No serás un perpetrador, no serás un observador pasivo y no serás una víctima
Nos cabe como dirigentes de instituciones que luchamos contra el antisemitismo plantarnos con la suficiente firmeza para que no sea costumbre ni sea fácil ni gratuito atacar a un judío por su condición de tal. No permitir que hagan de nosotros una víctima.
Si es así, ¿a qué lo atribuís?
Hay antisemitismos de derecha, de izquierda y del Islam fundamentalista. El segundo y el tercero tienden a unirse. Básicamente el antisemitismo es la proyección en los judíos de aspectos propios que al antisemita le resulta más fácil verlo en un judío que asumirlo como propio. Si el judío tiene la culpa, entonces yo no la tengo.
En los últimos días cobró trascendencia las amenazas al presidente de la DAIA, ¿creés que se llegó a un límite con esa amenaza?
En 2019 un rabino de la comunidad judia de Rosario fue golpeado en la calle.
También, en el 2020 hubo afiches en Neuquén y pintadas en Paraná.
En el encendido de velas de Jánuka en Bahia Blanca nos gritaron «Judíos culo sucio».
Hace poco en las sierras de Córdoba una familia de turistas observantes fue agredida físicamente.
En tanto y en cuanto la agresión verbal o física no sean gratuitas y se pague un precio, estaremos actuando de forma disuasiva.
En el extremo de la agresión judeofóbica nos volaron la AMIA hace casi 27 años y Carlos Telleldín fue dos veces absuelto.
Cuando la justicia no cumple su rol punitivo, nos queda expresarnos libremente como ciudadanos.
Yo uso mucho mi cuenta personal de Twitter (@fabineiman) para dejar claras mis posiciones respecto del antisemitismo.
Hemos llegado al extremo de amenazas al presidente de la DAIA. Como presidente del Consejo Federal de la DAIA expreso mi mas enérgico repudio a las amenazas recibidas por Jorge Knoblobvits. Debemos estar firmes y espaldas con espaldas contra el antisemitismo.
En los últimos tiempos se conocieron algunos hechos antisemitas en el interior del país que encendieron las alarmas. ¿Cómo se está trabajando en ese aspecto? ¿Tienen apoyo de las autoridades provinciales?
Nuestro rol como dirigentes de DAIA es justamente ese. El vínculo con las autoridades provinciales, con los medios, con organismos de seguridad y con resortes políticos, las acciones judiciales, etc. La situación es heterogénea y cada provincia es distinta. Cada askan (voluntario) intenta tener el mejor vínculo posible con las autoridades locales o provinciales.
Muchas provincias, municipios e instituciones adoptaron la definición de antisemitismo de la IHRA, ¿creés que sirve a la hora de la sanción? ¿Se cumple?
Tenemos miradas variadas al respecto. En parte se cumple si el dirigente local tiene la determinación y la actitud de exigir su cumplimiento.
¿Hay temor en el interior del país?
No hay temor. No nos preocupamos. Nos ocupamos. Nosotros en Tucumán tenemos hace más de 30 años una mezquita que adhiere al Hezbollah a tres cuadras de una de nuestras sinagogas.
Cuando hablamos claro y señalamos a los cultores del odio a Israel y al judío, y lo hacemos indistintamente en público o en privado, las autoridades toman nota de que la comunidad judía local no va a tolerar expresiones y mucho menos acciones que atenten contra nuestro ser judíos sionistas en Argentina. La aptitud dirigencial es muy importante. La actitud suele definir muchas cosas.
¿Alguna provincia lo sufre de manera más pronunciada que otra?
No lo creo. En Santa Rosa, La Pampa, el matutino La Arena destila su Israelofobia en forma cíclica. Nosotros lo monitoreamos permanentemente.
El Sheik de la Mezquita Iraní de Tucumán pasa más tiempo difundiendo su odio en Chile que en Tucumán, porque sabe que aquí no le dejamos pasar ni una.
Creo que las amenazas más importantes están en Buenos Aires. Allí tienen el antisemitismo de Derecha de Santiago Cúneo o de Biondini, el antisemitismo de izquierda de Luis D’elia y Fernando Esteche.
Por Buenos Aires camina libre Telleldín, quien armó el coche bomba que voló la AMIA, Y también Lagomarsino que dejó el arma homicida con el que horas después asesinaron al fiscal que esclareció la causa AMIA.
De una mezquita de Buenos Aires partieron los homicidas de ambos atentados.
Creo que en todo el país debemos estar atentos, y saber que lo que no logramos frenar en una latitud puede influir en que alguien se sienta más libre en otra ciudad para expresar su judeofobia con palabras o con acciones.
En la medida en que eso tiene un precio resulta disuasivo.
¿Cómo piensan afrontarlo?
Como lo hacemos cada día. Con actitud y aptitud. Intentamos formarnos permanentemente como dirigentes. Tenemos conciencia de que vivimos en una aldea global, donde Irán amenaza cada día a Israel y su derecho a existir.
Eso repercute en filiales iraníes locales que copian textualmente los discursos de odio de los Ayatollah, y encuentran cada tanto mercenarios o judeófobos locales con quienes aliarse.
Nosotros nos formamos, nos informamos, intentamos mejorar nuestras aptitudes y, lo más importante, la actitud.
Somos judíos orgullosos que no pedimos permiso para existir ni para vivir nuestro judaísmo como cada uno lo siente.
¿Cómo se coordinan con DAIA central? ¿Están en contacto permanente?
El diálogo es rico y heterogéneo. Se sabe que donde hay dos judíos hay tres opiniones. Lo más importante es saber estar firmes y espaldas con espaldas ante las amenazas.
Nuestro presidente acaba de ser amenazado por tercera vez durante su gestión. Las 25 filiales del interior, en forma unánime, lo apoyamos en este momento difícil.
Si es con uno, es con todos. El Pueblo de Israel es uno solo. Y el Pueblo de Israel vive. En cada rincón de la Argentina.
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