Con la actual pandemia, muchas personas han estado luchando contra problemas de salud mental como la ansiedad, la depresión, el estrés, la amargura y la falta de perdón.
Los médicos dicen que la salud emocional está directamente ligada a la salud física; sin embargo, una nueva investigación muestra que las personas pueden mejorar drásticamente su bienestar general leyendo las Escrituras.
John Plake, de la Sociedad Bíblica Americana, habló de los resultados de un estudio reciente, que revela que un compromiso más profundo con la Biblia puede tener un efecto positivo en las personas. "En medio de una pandemia y de esta especie de trastorno único en un siglo que hemos vivido en Estados Unidos, nos interesaba saber cómo ayuda la Biblia a la gente. Nos animó mucho darnos cuenta de que en medio de la languidez y la lucha que ha vivido la nación, las personas que están profundamente conectadas a la Biblia y a la comunidad cristiana son notablemente resistentes", dijo Plake a Healthy Living de CBN.
Plake dijo que está claro que los niveles de estrés han aumentado como resultado de la COVID-19, y ese estrés adicional no ha terminado.
"Los niveles de estrés son extremadamente altos. Todos los indicadores de estrés que analizamos, y hay 10 de ellos en el estudio, aumentaron cuando la pandemia empezaba a afianzarse realmente y la vida de las personas se veía alterada", explicó. "El estrés no ha bajado, en realidad ha subido. Vimos que el 48% de los estadounidenses dicen haber experimentado un evento significativo y traumático en sus vidas."
Sin embargo, la investigación muestra que las personas que están conectadas con una comunidad cristiana fuerte y profundamente involucradas con la Palabra de Dios eran más aptas para superar ciertos desafíos.
"Lo que descubrimos fue que si las personas estaban comprometidas con las Escrituras, lo que significa algo más que dedicar tiempo a la lectura de la Biblia, sino una interacción constante con la Biblia que comienza a dar forma a las elecciones de las personas y transforma sus relaciones con Dios, con ellos mismos y con los demás", dijo Plake. "Cuando se comprometen profundamente con las escrituras y permiten que toquen sus corazones, vemos que los niveles de estrés disminuyen significativamente".
"Vemos un aumento de los niveles de esperanza. Algunos de los niveles más altos de esperanza en el futuro se dan entre las personas que están más cerca de la Biblia. Por último, vemos entre las personas que han sido traumatizadas que las personas que están comprometidas con las Escrituras son más propensas a perdonar a quienes les han hecho daño. Incluso si esas personas no pidieron perdón".
Plake dijo que el punto brillante en 2020 y 2021 es que la Sociedad Bíblica Americana registró un aumento sustancial en los usuarios de la Biblia.
"Vimos un incremento del orden de 12 millones de personas que ahora usan la Biblia al menos ocasionalmente y que antes no lo hacían. Pasamos de unos 169 millones de personas que usan la Biblia al menos ocasionalmente a 181 millones de personas que se registraron en enero de 2021. Son muy buenas noticias".
Durante el estudio también se examinó el tiempo consistente con la Palabra de Dios y la importancia de ir a la iglesia.
Plake señaló que la participación en la iglesia y en la comunidad de fe puede proporcionar respuestas para aquellos que están sufriendo.
"En esta época en la que la gente está luchando contra el dolor, el desplazamiento, la decepción... sus esperanzas se han visto truncadas de muchas maneras para muchas personas en todo Estados Unidos, creo que es una oportunidad para que la iglesia diga que hay un panorama más amplio aquí. Hay una historia más grande aquí y hay una comunidad de personas que te aman", explicó.
"La iglesia proporciona esa comunidad de personas que te aman, la Biblia proporciona la historia más grande. La Biblia es la historia de cómo Dios actúa en medio de nuestras luchas para superarlas y conseguir un futuro mejor y las esperanzas que todos tenemos de una vida mejor".
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