Frente al memorial que recuerda los nombres de las 85 personas asesinadas el 18 de julio de 1994, el dirigente depositó una ofrenda floral y encendió una vela en honor a las víctimas. Allí, el rabino de AMIA, Eliahu Hamra, pronunció una plegaria para recordar a cada una de las víctimas fatales.

 

Acompañado por el embajador de Israel en la Argentina, Eyal Sela; representantes diplomáticos de la embajada israelí, e integrantes del Parlamento israelí, el funcionario abordó temas vinculados con la actualidad de Israel y el ataque terrorista del 7 de octubre pasado, en un encuentro con autoridades de numerosas entidades comunitarias que se dieron cita en la sede de Pasteur 633.

En la reunión también estuvieron presentes Elhanan Danino, padre Uri (Z´L), quien fue secuestrado por el grupo Hamas y asesinado en un túnel en Rafah, y Avi Hasidim, padre de Naor (Z´L), un joven que fue asesinado junto a su novia Sivan Elkabets (Z´L), el 7 de octubre pasado.

 

Los dirigentes comunitarios que participaron del almuerzo expresaron todo su apoyo y solidaridad con el Estado de Israel, y manifestaron su compromiso en seguir reclamando por la pronta liberación de todas las personas que continúan cautivas en manos de la organización terrorista Hamas.

Antes de retirarse del edificio, Amir Ohana dejó su firma en el Libro de Visitas de la AMIA, dejando sellado así su importante paso por la institución.