El papa Francisco envió una carta a los obispos argentinos, en la que se une a la convocatoria de una novena y una misa para rezar a la Virgen de Luján por la patria el 8 de mayo , en medio de las dificultades que atraviesa el país por la pandemia del coronaviru s.
"Estaré espiritualmente junto a ustedes, como peregrino espiritual y virtual", expresó Francisco en la carta manuscrita dirigida al arzobispo de Mercedes-Luján, Jorge Scheinig , al referirse a la misa que se celebrará el viernes próximo, a puertas cerradas, en el principal santuario del país.
"Le pediré que nos cuide y -porque soy pecador- le pediré que nos dé la gracia de pedir siempre perdón, de no cansarnos de pedir perdón. porque sabemos que su Hijo no se cansa de perdonar", escribió el pontífice en su mensaje a los obispos.
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Como todos los años, la festividad de la Virgen de Luján se celebra el 8 de mayo y este año, ante la pandemia, el Episcopado anunció una novena, para rezar especialmente cada día, en las jornadas previas, por los trabajadores de la salud y tareas esenciales para la comunidad, por los que se dedican a la investigación para obtener una vacuna, por los fallecidos y por las autoridades civiles. Cada día, un obispo presenta una meditación especial sobre el tema de esa jornada desde su diócesis.
La novena incluye, también, una convocatoria de los obispos para rezar mañana por los que no tienen trabajo o lo han perdido . Pasado mañana, la oración estará destinada a los que están lejos de sus familias; el miércoles se impartirán plegarias por los que viven en situación de calle y el jueves se rezará por la patria.
La carta manuscrita del papa Francisco
Al recordar una fecha que siempre celebró cuando estaba en la Argentina, el Papa expresa que "se acerca el 8 de mayo.y mi corazón 'viaja' a Luján".
"Estaré espiritualmente junto a Ustedes, como peregrino espiritual y virtual. La miraré una vez más y, también una vez más, me dejaré mirar por Ella. Esa mirada de madre que te renueva, te cuida, te da fuerzas", añade Francisco en la carta.
Y agrega: "Y no estaré solo, sino junto al santo pueblo fiel de Dios que la quiere tanto, pueblo fiel y pecador como yo".
"Le cambiaremos el manto todos juntos, le diremos nuestras preocupaciones y nuestras alegrías. Le pediré que nos cuide y -porque soy pecador- le pediré que nos dé la gracia de pedir siempre perdón, de no cansarnos de pedir perdón. porque sabemos que su Hijo no se cansa de perdonar", escribe el pontífice.
El papa Jorge Bergoglio confía, además, a los obispos: "Y le haré la promesa de portarme mejor 'robándole' la palabra a ese gran sacerdote de mi anterior diócesis [por la arquidiócesis de Buenos Aires]: 'Esta tarde, Señora, la promesa es sincera. Por las dudas, no olvides dejar la llave afuera'". Citó, así, un pensamiento del párroco y poeta Amelio Luis Calori, en su libro "Aula fulgida".
El próximo viernes, el arzobispo Scheinig celebrará la misa por el fin de la pandemia y por la patria en el santuario de Luján, a puertas cerradas. Se cumplirá el tradicional cambio de manto de la Virgen y la gente puede realizar a distancia aportes para una colecta solidaria de Cáritas.
Por: Mariano De Vedia
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