Así lo manifestó Gabriel Silber, integrante de la Comisión de amistad chileno-israelí del Parlamento de Chile, en diálogo con la Agencia Judía de Noticias (AJN), en el marco del Foro Global del American Jewish Committee (AJC) en Washington.
Gabriel Silber, vicepresidente de la Cámara de Diputados de Chile, señaló que el AJC es una institución con la cual se conectan mucho en su país, tanto a nivel parlamentario y político, como comunitario. “Han sido un referente importante para nosotros, sobre todo respecto a discusiones que a veces se ven muy lejanas pero que se han ido instalando efectivamente en nuestro país; temas como el BDS, el conflicto árabe-israelí o incluso la situación de Latinoamérica para nuestras comunidades. El AJC siempre ha sido un factor muy relevante para nosotros desde Chile”, indicó.
El grupo de amistad chileno-israelí está integrado por 20 parlamentarios, sólo dos de ellos son judíos. Sin embargo, Silber afirmó que muchos de sus colegas tuvieron la suerte de viajar a Israel y “acabar con los mitos que se instalan muchas veces en la opinión pública respecto del tema árabe-israelí”. “Han visto en Israel, como digo, un país que les ha apasionado, que les ha dado la posibilidad de tener una perspectiva distinta de lo que pasa en Medio Oriente”, expresó. Uno de los resultados de esta perspectiva distinta que se tiene del Estado judío resultó en esta comisión que ya lleva una década de existencia en el Congreso. “Nos gusta ser un puente con Israel, generar buenas comunicaciones, alianzas estratégicas que van mucho más allá de los temas de la comunidad”, agregó.
A pesar de los avances y esfuerzos de estos parlamentarios para mejorar las relaciones entre ambos países y reflejar una cara poco conocida de Israel, Silber afirmó que no dejaba de ser “un factor de alerta” la presencia de la comunidad palestina más grande en la diáspora en Chile. “Tratamos de generar las mejores relaciones, y muchas veces ellos confunden las cosas queriendo importar los conflictos”, advirtió.
“Ellos tienen su propia banca, muy grande y con mucha influencia, en el Congreso chileno. Desgraciadamente han realizado de manera persistente acciones para importar el conflicto a nuestro país”, manifestó, en referencia a las acaloradas discusiones en las sesiones parlamentarias sobre el tema de Gaza. Sin embargo, y a pesar de los obstáculos, Silber destacó la labor de la Comisión de amistad, afirmando que no intentan “imponer una visión en particular” y eso, “al final del día, cosecha buenos resultados, porque tenemos parlamentarios muy comprometidos con nuestra causa y que se han solidarizado mucho con Israel”.
Por último, remarcó que el modelo chileno era “absolutamente replicable para otros países”.
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