Ayer, en una concurrida ceremonia en el Salón Eva Perón de la Legislatura porteña, se realizó el homenaje por los 100 años del nacimiento de Nelson Mandela. El acto fue presidido por el diputado y Vicepresidente Primero de la Legislatura, Francisco Quintana; el Procurador General de la Ciudad de Buenos Aires, Gabriel M. Astarloa; la Embajadora de la República de Sudáfrica, Phumelele Gwala; y el diputado Claudio Heredia.
Con la presencia de vecinos de la Ciudad, alumnos de escuelas públicas, ex jugadores del Seleccionado Argentino de Rugby (los Pumas) y autoridades de la Fundación Espartanos, se reflexionó sobre el legado de Mandela en nuestros tiempos como uno de los líderes más influyentes del siglo XX y principal ícono de la lucha contra la segregación racial en Sudáfrica. “Mandela es por su vida y por lo que significó, la personificación de la concordia política, que es la unión de los corazones”, afirmó el Procurador porteño.
En el acto la Embajadora Phumelele Gwala recibió una bandeja conmemorativa y aseguró que Mandela fue una “figura central de nuestra liberación, sacrificando su libertad por ser consecuente con su posición política y sus ideales” y que por ello logró una “Sudáfrica unida, no racial, no sexista, democrática y próspera”. Luego el abogado Madoda Ntaka, miembro del partido político Congreso Nacional Africano, reseñó varios de los logros de Mandela como abogado, activista y líder político.
También participaron del evento Oscar Hansen, presidente de la Cámara de Comercio argentino-sudafricana, quien resaltó los vínculos que unen a ambos países; Martín Durand, ex jugador Puma; y Eduardo Oderigo, de la Fundación Espartanos, quien destacó el valor del rugby y de la figura de Mandela en la tarea de integración social que llevan adelante en las cárceles.
Comentá la nota