Al encabezar la tradicional celebración del 25 de Mayo ante el presidente Alberto Fernández, describió la grave crisis social y el acuciante cuadro de la pobreza
Mariano De Vedia
Un llamado “urgente” a la unidad, ante el peligro de la fragmentación, y a revalorizar “el sistema republicano y democrático elegido por los fundadores de la patria, formuló el arzobispo de Buenos Aires, cardenal Mario Aurelio Poli, ante el presidente Alberto Fernández, en la Catedral metropolitana.
Acompañado por sus obispos auxiliares y dignatarios de otras confesiones religiosas, Poli marcó la deuda del combate a la pobreza y tradujo en números el afligente cuadro social con que conviven los argentinos. “Seis de cada diez niños y adolescentes son pobres y este porcentaje se visualiza más crudamente si consideramos que alcanzan a 8.200.000 personas menores de edad, de los cuales hay más de 4.200.000 con carencias alimenticias”, describió el cardenal.
En otro tramo de la celebración y en uno de los pasajes clave de su mensaje, destinado a revalorizar el rol institucional, Poli pidió que “la prudencia de sus autoridades y la honestidad de sus ciudadanos robustezcan la concordia y la justicia y podamos vivir en paz y prosperidad”. Y, más tarde, añadió que “la Justicia es la única garantía de una paz sólida y duradera”.
ENTRE LA CASA ROSADA Y LA CÁRCEL
También dijo que en las puertas de un nuevo proceso electoral se genera “una inmejorable oportunidad para que los candidatos manifiesten su vocación de servicio y aprovechen sus palabras para hacer docencia democrática, con propuestas claras y realistas y sin descalificar a los que compiten”.
La celebración en la Catedral metropolitana significó el último Tedeum de la presidencia de Alberto Fernández, que terminará su mandato en diciembre. Será seguramente también el último para el cardenal Poli, ya que se considera inminente la designación de su sucesor.
En los minutos finales, se le acercó el micrófono al Presidente, quien coincidió con el diagnóstico del cardenal primado. Ratificó su “compromiso con los que menos tienen” y reveló que en su gestión recurrió “varias veces al papa Francisco y nunca dejó de ayudar cuando la Argentina lo necesitó”.
El Presidente concurrió con su gabinete y cerca de él se destacaba presencia del ministro de Economía, Sergio Massa. El titular de Defensa, Jorge Taiana, lo acompañó a rendir homenaje ante el mausoleo de San Martín, junto a los jefes de las Fuerzas Armadas, y también concurrieron a la Catedral el jefe de gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta, y sus ministros de Gobierno, Jorge Macri, y de Salud, Fernán Quirós, anotados en la carrera para sucederlo.
En su homilía de 12 minutos, Poli convocó de entrada a transitar caminos de unidad. “Cuando priman intereses particulares sobre el bien común o cuando el afán se impone por encima del diálogo y la justicia, se menoscaba la dignidad de las personas e indefectiblemente crece la pobreza en todas sus manifestaciones”, dijo.
Y ratificó el compromiso con los principios de la Constitución. “Aun con todos los límites de un sistema en manos humanas, nuestro régimen democrático ha probado ser el más óptimo ordenador de nuestra vida civil, garantizando libertades, favoreciendo procesos de inclusión y promoviendo derechos sociales”, explicó.
Agregó, sin embargo, que hoy “no se ven desplegadas todas sus virtudes y bondades”.
Dijo que el legado de los fundadores de la patria “llega hasta nosotros después de recorrer un sinuoso camino dos veces centenario, que conoció aciertos y fracasos, encuentros y desencuentros, hasta marcar un hito fundamental cuando primero juramos observar la carta magna de la Independencia y luego, la Constitución nacional esperada, donde elegimos el sistema republicano y democrático para ordenar nuestra convivencia como pueblo”.
Y añadió: “Eso nos permitió superar el gran drama de la guerra fratricida, conocer tiempos de progreso y convivencia pacífica, entre otros tantos logros”.
Jorge Macri y Fernán Quirós en el Tedeum por el 25 de MayoMomentos de conflictividad
El cardenal Poli insistió en la prioridad de transitar caminos de consenso en el país. “Necesitamos aceptar que toda democracia padece momentos de conflictividad. En esas situaciones complejas, alimentar la confrontación buscando culpables en el pasado o en el presente, puede parecer el camino más fácil, sembrando desconfianza y alimentando más enfrentamientos. Pero el modo más sabio y oportuno de prevenirlas y abordarlas es procurar consensos a través del diálogo”.
Y dejó un mensaje, dirigido principalmente a la dirigencia, para que se sometan a una autocrítica. “Debemos admitir con humildad, que si hablamos de un debilitamiento y descrédito de nuestra democracia, sus causas hay que buscarlas en la suma de responsabilidades compartidas de todos”.
A 213 años de la fecha patria de 1810, el cardenal transmitió el agradecimiento la generación de los hombres que forjaron la Revolución de Mayo y llamó a continuar su legado. “Si no recordamos agradecidos de dónde venimos, difícilmente podamos avaanzar hacia donde que remos ir como nación”.
Poli analizó las debilidades que interpelan hoy al país y marcó las deficiencias del sistema educativo, en un contexto social desfavorable para las poblaciones más vulnerables. Insistió en la necesidad de “procurar consensos a través del dialogo”.
Comentá la nota