Por Almudena Martínez-Bordiú

Después de descansar en la Nunciatura Apostólica, el coche oficial del Santo Padre llegó hasta las puertas del palacio presidencial a las 18.00 de la tarde (hora local).

Numerosos fieles le recibieron en los alrededores del palacio con carteles, aplausos y ovaciones. Cabe destacar que cerca del 98% de los habitantes de Timor Oriental son católicos, lo que le convierte en uno de los países más católicos de Asia.

A su llegada a la entrada del palacio fue recibido por el presidente y la guardia de Honor. Después de escuchar el himno del país, se presentaron un total de 29 niños con trajes tradicionales que representaban los diferentes distritos.

3 de ellos ofrecieron al Papa flores y el pañuelo tradicional, el “tais”. El Papa Francisco abrazó cariñosamente a los niños después de la entrega floral.

Tras la ejecución de los himnos y los honores a las banderas, tuvo lugar la presentación de las respectivas Delegaciones.

Allí estaban presentes, entre otros, el Nuncio Apostólico en Timor Oriental, Mons. Mons. Wojciech Załuski, y el Arzobispo de Dili, Virgilio do Carmo da Silva, a quien el Papa Francisco creó cardenal en 2022.

El Papa Francisco firma en el libro de honor. Crédito: Daniel Ibáñez/EWTN News

A continuación, después de que el Santo Padre firmara en el libro de honor, se reunió con el Presidente de forma privada, mientras los miembros de la Secretaría de Estado y las autoridades religiosas se reunieron con el Primer Ministro.