De la actividad participó el secretario de Culto de la Nación, Guillermo Oliveri, y referentes de las confesiones religiosas que conviven en la Argentina.
Referentes de las confesiones religiosas que conviven en la Argentina realizaron una visita inédita al Museo Sitio de Memoria ESMA, donde funcionó uno de los más grandes centros de clandestinos de detención de la última dictadura militar y que se postula para integrar la lista del Patrimonio Mundial de la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (Unesco).
Por la comunidad musulmana en el país estuvieron el secretario del Centro Islámico de la República Argentina (CIRA), Hassan el Bacha; el presidente de la Asociación Árabe Argentina Islámica, Adalberto Assad, y Daniel Hosain, titular de la Federación de Entidades Islámicas de la Argentina.
Los líderes religiosos fueron recibidos por la directora ejecutiva del Museo, Mayki Gorosito, quien estuvo acompañada por el secretario de Culto de la Nación, Guillermo Oliveri; la subsecretaria de Promoción de Derechos Humanos, Natalia Barreiro, y la referente del Espacio Interreligioso Patrick Rice, Fátima Cabrera, informó la agencia Télam.
La actividad comenzó pasadas las 14 y constó de un recorrido privado de más de una hora para la comitiva interreligiosa que visitó los distintos espacios del museo con la guía del nieto restituido Guillermo Amarilla Molfino.
Según refirieron los asistentes a la agencia Télam, la recorrida fue "en silencio con una actitud expectante de mucha conmoción".
El Museo Sitio de Memoria ESMA funciona en el edificio del Casino de Oficiales, donde estuvo instalado el Centro Clandestino de Detención, Tortura y Exterminio de la Escuela de Mecánica de la Armada, uno de los 700 lugares de este tipo que existieron durante la última dictadura cívico-militar.
En la ESMA estuvieron detenidos-desaparecidos cerca de 5.000 hombres y mujeres: militantes políticos y sociales, de organizaciones revolucionarias armadas y no armadas, trabajadoras, trabajadores y gremialistas, estudiantes, profesionales, artistas y religiosos.
Comentá la nota