Esta Comisión, coordinada por el sacerdote José María Di Paola, el padre “Pepe”, expresó: “La situación es desesperante y nos preguntamos cuál es la respuesta que como sociedad estamos ofreciendo. Debemos sincerarnos. En los centros urbanos estamos discutiendo modos novedosos de intervenir, organizando congresos y analizando las falencias de los distintos paradigmas y modelos teóricos, muchas veces importados, y la respuesta sigue siendo insuficiente, mientras hay cerca de un millón de jóvenes que no estudia ni trabaja en nuestro país. En ese sentido, advertimos que la respuesta que se sigue dando es con un acentuado enfoque en la dimensión represiva hacia los sectores más vulnerables.

Basta comparar el presupuesto del Ministerio de Seguridad con el de la Sedronar para comprender la desproporción de la que estamos hablando.

Pero hay que decirlo, si a nuestros jóvenes no les ofrecemos oportunidades reales para crecer, para descubrir el sentido de la vida, políticas públicas de prevención y un sistema de salud adecuado, van a ser estructuralmente vulnerables”.

El MSD, ya en marzo del año 2010, había presentado a las autoridades un gran “Plan deportivo-artístico”, denominado Asignación Universal por Deporte y Recreación (AUHD), la que tenía por objeto dotar a todos los beneficiarios de la Asignación Universal por Hijo (AUH,) de un complemento para que los niños de 6 a 16 años (casi 2 millones de jóvenes) paguen la cuota societaria y deportiva en el Club, con la obligación de asistir 3 veces por semana a la realización de actividades deportivas y/o artísticas con docentes. Estos proyectos también fueron presentados en las provincias sin ninguna respuesta positiva.

Como añadidura, la diputada nacional (M/C) Claudia Giaccone lo impulsó como  Proyecto de Ley  Nacional, y fue introducida luego por el diputado Mauricio Gómez Bull, como tema central  en la Ley 27.201/15 que nunca se cumplió. En este caso debemos aclarar que el lobby empresarial sumado a la flaqueza y mezquindad de algunos legisladores que piensan más en lo electoral que en la Patria, se negaron a que los fondos, para este importante proyecto, salgan de un mínimo impuesto al tabaco, el alcohol y las gaseosas, dejándolo al presupuesto general.

“Desde hace 40 años, el Estado no se organiza de manera inteligente para abordar este tema de las adicciones; es una deuda pendiente de la democracia. No alcanza con perseguir al narcotráfico, hay que cuidar a los pibes”,  reprochó el Cura Pepe Di Paola, en la presentación.

Ahora el MSD, se suma a la Convocatoria de la Iglesia presentando distintos proyectos en los tres niveles de gobierno, apoyando esta Declaración de la Emergencia Nacional en Adicciones y, acompañados por los curas villeros solicitan que en el ámbito de prevención se cumpla urgentemente con lo estipulado en la Ley 27.201 (AUHD). También proponen construir, de manera colectiva, espacios de prevención que tengan como puntales institucionales a lo que resumen como las tres ‘C’: el club, la capilla y el colegio, en los barrios más vulnerables.