En una semana intensa de trabajo y aprendizaje cívico-social, adolescentes de siete escuelas de Bañado Norte y Trinidad, trabajaron juntos, debatieron y realizaron diferentes actividades con el objetivo final de proponer soluciones concretas a las roblemáticas seleccionadas por ellos: violencia entre barrios y embarazo precoz.

El equipo de Scholas Ciudadanía, encabezado por su director mundial, José María del Corral, arribó a Asunción el 22 de junio. Durante la primera semana, los estudiantes trabajaron acerca de cuáles eran sus preocupaciones, debatieron como ciudadanos, llegaron a un acuerdo e identificaron los dos problemas que más los afectaban: la violencia  – enfocada en la rivalidad entre las escuelas y entre los barrios - y el embarazo adolescente. Votaron entre otras cuantas problemáticas como inseguridad, adicciones, trabajo infantil, calidad educativa, mal uso de la tecnología y medio ambiente. 

Este lunes comenzó la segunda parte del programa, denominada semana de inmersión. Durante cuatro días los chicos salieron y recorrieron los barrios, investigaron, elaboraron hipótesis, recibieron capacitaciones en la metodología y en la definición de variables, realizaron entrevistas a autoridades, encuestas y sondeos de opinión en la calle y trabajo de campo. 

Toda esta recopilación de datos les permitió elaborar un diagnóstico situacional y propuestas concretas que hoy presentaron ante la Ministra de Educación y Cultura de Paraguay, Marta Lafuente, y máximas autoridades.  Estas conclusiones e iniciativas serán entregadas por los propios alumnos al Papa Francisco cuando el Santo Padre visite el Bañado Norte a encontrarse con ellos la semana próxima.

Al terminar de presentar los alumnos sus problemáticas, la Ministra de Educación, Marta Lafuente,  firmó un acuerdo con el director mundial de Scholas, José María del Corral, para que con el apoyo del BID (Banco Interamericano de Desarrollo), representado por Eduardo Almeida, esta experiencia educativa se extienda a más escuelas y zonas del país. 

De este modo Paraguay convierte en política de estado la experiencia comenzada por Jorge Bergoglio cuando era arzobispo de Buenos Aires, en Argentina.