Por Eduardo Berdejo

El Prelado hizo este anuncio durante una conferencia de prensa realizada el pasado 10 de enero, donde indicó que aún no se ha determinado el momento en que el Santo Padre se acercará a la rivera del Río Bravo para elevar una oración por los migrantes, pues corresponde al personal del Vaticano determinarlo.

Como se sabe, el Pontífice celebrará el 17 de febrero una multitudinaria Misa en el predio de la “Antigua Feria Expo”, que se encuentra junto al Estadio Olímpico Benito Juárez, a unos metros del río fronterizo.

Sin embargo, indicó el Sistema Informativo de la Diócesis de Ciudad Juárez, el Prelado “sí pudo adelantar que el Papa realizará una oración en silencio por los millones de migrantes en todo el mundo, como un signo silencioso para todo el mundo, pues la migración es un fenómeno global que se da en todos los continentes. Buscando que los migrantes sean vistos como seres humanos, objeto de acogida y fraternidad”.

El Río Bravo marca la frontera entre México (Chihuahua, Coahuila, Nuevo León y Tamaulipas), y Estados Unidos (Texas), donde se le conoce como Río Grande; el cual es cruzado para ingresar de manera ilegal al país del norte.

Según el Instituto Tamaulipeco para los Migrantes (ITM), durante 2015 han muerto al menos ocho personas intentando cruzar este río desde México hacia Estados Unidos.

Durante la conferencia de prensa, Mons. Torres Campos dijo que los puntos importantes “en Ciudad Juárez son la migración, el trabajo, el mundo de la cárcel y las víctimas de la violencia”.

Asimismo, reiteraron que los boletos para participar en la Misa son totalmente gratuitos, por lo que se pidió a los fieles no dejarse engañar con supuestas ventas de entradas.

“Los boletos aún no han sido impresos y la forma de distribución es a través de las comunidades parroquiales, se entregarán aproximadamente 400 por parroquia”, indicó el Sistema Informativo.